Anochece y en este rincón de Mendoza dos Leones y Galaxias coinciden en pensar que la lluvia cae con la triste noticia de la partida de Chris Cornell. Ellos, atravesados por la movida de Seattle, respetuosos de Soundgarden y, sobre todo, del Cornell solista, lo procesan con agradecimiento.
Tanto como el que sienten por toda la música que Diego Álvarez y Luciano Arcidiácono vienen incorporando desde niños.
Diego, el bajista, tuvo un abuelo luthier, creció escuchando metal y se embebió del jazz hasta que ningún género le fue ajeno.
Luciano, el cantante, empezó grabando casetes con los temas de la radio, rasgando la guitarra y componiendo cadáveres exquisitos con intención de canción.
Ambos, musicalmente, coincidieron en El Cogollo y, tras su disolución, decidieron sostener la gravitación rockera que los unía.
“Hubo una época de transición -cuenta Diego- en el que salíamos de El Cogollo con un disco por grabar y que terminó siendo el primer material de Leones y Galaxias”. Ese Cd se llamó “Elemental” y contuvo el primer estallido de una constelación propia.
“Hay que hacer muchas muchas canciones malas para sacar algo nuevo”, dice con paciencia el que empuña el bajo acústico. Los dos no paran de generar ideas, melodías, letras y saben que la única distancia entre la inspación y la satisfacción es el trabajo compartido. Pero como su talento e impulso no tiene límites, “la cosa se va expandiendo”.
Por eso nació “Abedul”, el segundo disco. Una suerte de metáfora de la banda, que pasó de cogollo a árbol poético. “Despertar bajo los rayos del sol/ teñido en su color/ los pájaros me llevaron a ver/ los secretos del lugar...”, canta Luciano en el tema que da nombre al disco y cuyo arte de tapa es una fotografía que su padre (el reconocido Cayetano Arcidiácono) tomó en los ‘70s.
Así, recorren tanto el sonido eléctrico del rock y el grunge como el intimismo acústico. Pues si la banda suena potente (con Fana Martínez en teclados y Raúl Arnal en batería) también Diego y Luciano colorean las canciones en un formato intimista, a dúo.
Ahora que acaban de llegar de una gira por Buenos Aires y Córdoba, Leones y Galaxias piensa abocarse a la presentación de “Abedul” y a la grabación de un video.
Otra de las experiencias inspiradoras que han compartido las dos cabzas es la realización de la banda sonora de “Las tres torres de Hualilán”, cuento de Draghi Lucero, en la adaptación dirigida por Fabián Castellani.
Y algo de todo este universo es lo que define su música: los paisajes de un corazón que busca, la conciencia atravesada por la inmensidad, aquellos hombres perdiéndose en la noche.
Ese Cosmos
Leones y Galaxias nació en Las Heras, en el año 2010. Luego de editar varios demos, da forma a su primer trabajo de estudio, “Elemental”, editado en el año 2013, cuya presentación se realizó en el mítico estudio Zanessi de Mendoza. A fines de 2013, la banda fue seleccionada en un concurso nacional para tocar junto a otras 23 bandas de todo el país en el Teatro Vorterix de Buenos Aires.
A fines de 2016 se edita “Abedul”, segundo trabajo de la banda, producido en forma totalmente independiente. En este año 2017, Leones girará por todo el país y por Chile para hacer conocer y escuchar su nueva placa.
“Abedul” revela un nuevo punto de partida, un rock más potente, la libertad de la música, canciones escurridizas, para evitar cualquier encasillamiento, donde las melodías y la poesía marcan el camino.
Rock Sideral
Hoy es la reunión de tres bandas mendocinas con búsquedas afines y particulares dentro del rock: Peter Júpiter, Leones y Galaxias y Cipriano atómico. Esta noche, unen su sonido desde cada uno de sus estilos y proponen un encuentro mágico con la canción, las letras que expresan profundos estados emocionales, la fusión de géneros.
Desde 2001, Joe Moya (reconocido por legendarias bandas como Ananá Split, La Montaña, Planeta Garbo) lidera un proyecto rock pop en el que adopta el personaje del superhéroe Peter Júpiter (mitad hombre- mitad animal) para reflejar en sus letras distintas vivencias personales, con el aporte de importantes músicos de la escena local que lo acompañaron en distintas etapas.
Con una cuidada instrumentación y arreglos vocales, la banda incursiona mezclando diversos estilos, como bossa nova, funk y hasta aires de folklore. Lleva tres discos editados de manera independiente: “Peter Júpiter”, “Divinisimamentedivina”, “Niños y gatos” y un cuarto, “Extraño”, en proceso de masterización.
Cipriano atómico es una banda que nace en Buenos Aires y se instala en Mendoza, con Juani Romero (cantante, guitarrista, productor musical) y sus canciones en banda. En 2012 edita su primer EP “Cipriano atómico”, que gira en recitales en Capital Federal. Las composiciones de Rock/Pop, tienen acercamientos al folk, indie e inclusive al rock alternativo.
Entre diciembre de del 2016 hasta al momento Cipriano Atómico está atravesando la pre producción de su primer disco junto a Andrés Ceccarelli, productor y guitarrista que ha trabajado en proyectos como Trílicos, Agustina Bécares, Daniel Martín, entre otros.
La ficha
Rock Sideral: Peter Júpiter, Leones y Galaxias y Cipriano atómico.
Hoy, a las 21
Teatro La Compañía (San Martín 2494, Ciudad)