Leonardo Sbaraglia: "Este es el cine que más me interesa ver a mí como espectador”

La cita es en un restaurante de Palermo. En las dos últimas semanas el actor Leo Sbaraglia no paró de dar entrevistas ni aparecer en distintos medios. Es que a la lógica promoción de su próxima película a estrenar, "Aire libre", se le sumó la noticia de que "Relatos salvajes", el esperadísimo film del director Damián Szifrón, competirá por la Palma de Oro en el Festival de Cine de Cannes.

Está almorzando con su esposa la artista plástica Guadalupe Marín y su hija Julieta, pasando uno de esos pocos momentos libres que tiene en su agenda. La entrevista se realiza horas antes de su viaje a Francia. Está de muy buen humor, bien predispuesto para conversar, y muy atento a responder todas las preguntas. Un actor que carece de egocentrismo y que su principal característica es la humildad. 

-¿Qué te llevó a participar del film?

-Había visto las películas de Anahí Berneri, la directora, y me habían gustado mucho. Cuando me presentó la idea de hacer este film, ni lo dudé. Es una de esas realizadoras muy interesantes que tiene este país. Realmente logra cosas muy climáticas en sus films, y quizás a ella no le guste esta comparación, pero llega a esos climas que uno ve sólo en las películas de Lucrecia Martel. Hay algo de esa tensión subrepticia, de ese clima amenazante aunque en realidad no suceda nada en particular.

-La situación que está viviendo la pareja protagonista es bastante angustiante.

-Cuando ellos tienen que ir a vivir a la casa de la madre de Lucía, el personaje de Celeste, Manuel, que interpreto yo, no aguanta más de dos días. No soporta ese clima "hippie", por llamarlo de alguna manera, y además ellos no están bien. Él decide entonces "bajar la cortina". Cada vez que intenta estar con ella se encuentra como con un paredón, y después eso le pasa a ella con él. En esa nueva situación de estar separados de hecho, no sentimentalmente, les empieza a gustar estar así. Es dura la película.

-Hay cosas sutiles, como cuando cada uno de ellos busca amparo en otras personas.

-Es como que a los dos el foco se les empieza a ir, a descentrar. Ella a partir de esa historia como juvenil que empieza a tener con su hermano y los amigos, y él cuando tiene la necesidad de pasar tiempo en la casa de la familia del obrero que tiene un accidente en su obra. Ahí encuentra en la esposa del trabajador, que interpreta Lorena Vega, una mujer amorosa, un hogar cálido, y unos chicos adorables. Recibe la atención que necesita.

-Manuel va teniendo un nivel de violencia que va creciendo, ¿fue difícil ponerte en su piel?

-Es muy loco porque yo soy súper tranquilo, pero una vez que uno entra en la situación de la escena las emociones te salen solas. A mí esta profesión me gusta cada vez más por eso, porque uno puede realmente despegar toda la monstruosidad, la suciedad interna, a través de los trabajos. Es raro que se me dé por hacer ese tipo de películas en donde, generalmente, las mujeres me maltratan, como "En Terapia", "El Campo", y tantas otras, cuando en la realidad mi mujer es totalmente distinta a ellas. Me encantaría hacer una película mainstream, lo que pasa que este es el cine que más me interesa ver a mí como espectador.

-¿Cuáles son tus próximos proyectos?

-Voy a trabajar para HBO Brasil en una serie que se va a llamar "El Hipnotizador", basada en unas historietas de Pablo De Santis. Empiezo a filmar a finales de junio en Montevideo y va a tener ocho capítulos. Después me iría a México a hacer la segunda temporada de la serie "Dos Lunas", y tengo el estreno de otra película que filmé llamada Choele. Hay varios proyectos en cine, como realizar un largometraje que se llama "No Te Olvides de Mí", sobre una historia de inmigrantes en el año 1925.

Después con Hernán Belón, el director de "El Campo", haríamos una película sobre un boxeador; y con Alejandro Maci, el director de "En Terapia", para hacer una película basada en la novela "Los que Aman, Odian" de Silvina Ocampo y Adolfo Bioy Casares, la única que escribieron juntos. Y vamos a ver si podemos volver a Mendoza con la obra "El Territorio del Poder", basada en escritos de Rodolfo Walsh,  que nos fue muy bien allá.