El Leganés mantiene vivo su sueño copero tras empatar 1-1 en su campo con el Sevilla este miércoles en la ida de las semifinales de la Copa del Rey.
El colombiano Luis Muriel adelantó al Sevilla con un disparo cruzado (21), antes de que el griego Dimitrios Siovas hiciera el empate de cabeza (56).
El 'mata-gigantes' Leganés, que llegó a su primera semifinal de Copa tras apear en cuartos al Real Madrid, sigue muy vivo en la pelea por llegar a la final tras contener a otro grande de la Liga española.
El 'Lega' sufrió en la primera parte, antes de dar un paso adelante en la segunda.
En los primeros 45 minutos, los locales tuvieron problemas para salir de su campo ante un Sevilla que tuvo el control del juego y que presionaba para recuperar rápido cuando no tenía el balón.
Apenas había empezado a rodar el balón cuando el portero argentino del Leganés Nereo Champagne metió una mano providencial para evitar que rematara de cabeza su compatriota del Sevilla Gabriel Mercado (4).
Champagne fue el auténtico héroe de su equipo este miércoles, impidiendo con sus intervenciones una derrota mayor y manteniendo vivo al equipo pepinero en la eliminatoria.
Al cuarto de hora, Muriel avisaba con un disparo interceptado por Gerard Gumbau, antes de ver puerta cinco minutos después.
El colombiano aprovechó un pase hacia la derecha de Sarabia para escorarse y soltar un disparo cruzado que se coló en la portería tras rebotar en el segundo palo (21).
El gol cayó como un jarro de agua fría sobre el Leganés, que pasó por algunos momentos de desconcierto, mientras el Sevilla seguía imponiendo su dominio.
El partido se fue al descanso con dos disparos consecutivos de Clément Lenglet y Mercado en boca de gol que detuvo Champagne.
A la vuelta del descanso, el Leganés salió con más intensidad en busca de un rápido gol que le permitiera equilibrar el partido.
El 'Lega' presionaba muy arriba al Sevilla, que dio un paso atrás y no se mostraba tan dominador como en la primera parte.
El trabajo de los locales obtuvo su premio cuando en el 56 tras el saque de un córner, el balón salió hacia arriba y en su caída, el portero Sergio Rico sale mal y no puede impedir que Siovas cabecee casi sin querer al fondo de las mallas sevillistas.
El gol fue un auténtico mazazo para el Sevilla, que se quedó a la defensiva buscando sus oportunidades en salidas al contraataque durante unos minutos.
Poco a poco, el Sevilla se fue rehaciendo y volvió a recuperar el control del encuentro, pero ya no llegaba tan fácilmente ante un Leganés mejor plantado en el terreno de juego.
En el 67, Jesús Navas se sacó un centro-chut que se envenenó y a punto estuvo de sorprender a Champagne.
En los últimos minutos, ambos equipos empezaron a acusar el cansancio buscando sus oportunidades con balones largos y centros a las áreas, pero sin demasiado convencimiento pareciendo dar por bueno el resultado.
Tras el empate, la eliminatoria se decidirá la próxima semana en Sevilla.