De cinco disparos en el pecho, un hombre de 38 años fue asesinado ayer en el barrio Independencia de Las Heras. El criminal golpeó la puerta de su casa y cuando la víctima le abrió la puerta, le disparó. Adentro de la vivienda estaba su hija de seis años. Murió en el acto.
Cuando faltaban unos minutos para las 19 y un grupo de niños (todos menores de 10 años) jugaba a la pelota sobre calle Libertad y una madre y su bebé estaban sentados a la puerta de su casa ubicada en la esquina de esa calle con Aguado, se escucharon cinco disparos. “Corrí con mi hijo y me escondí en mi casa”, dijo la madre. Los niños por unos momentos pararon de jugar pero el partido luego continuó.
En cambio, sobre Libertad al 2200 yacía el cuerpo sin vida de Gustavo Soto, quien recibió cinco disparos que salieron de una pistola.
Quien le disparó se cree que iba en una bicicleta y le apuntó al menos cinco veces; todas las balas le dieron en el pecho y además tuvo roces en los dos brazos ya que se supone que intentó defenderse.
Fuentes policiales confirmaron que el asesino le golpeó la puerta y que cuando Soto abrió, lo acribilló. Luego se fugó. Adentro de la casa quedó su hija de seis años sola, ya que al momento del ataque estaban la víctima y ella.
Soto tenía medidas pendientes, dijeron fuentes policiales, dos de ellas recientes por amenazas, además de causas por robos y lesiones, confirmaron a Los Andes.
Mientras la Policía trabajaba en el lugar, vecinos -sobre todo una buena cantidad de niños- se juntaron a observar cómo se desarrollaban las pericias.
Investiga el caso el fiscal de Las Heras Darío Nora.