Se sabe que en la vida hay momentos donde hay que ser más fuerte que en otros. Son esos los momentos que van formando el carácter, en especial la de los futbolistas.
Saber superar las lesiones es una de las pruebas que tienen que superar, sobre todo las que son más graves.
En el clásico maipucino del domingo el Deportivo Maipú se fue con una mueca de sonrisa, ya que se llevó un empate como visitante pero además se fue con algo de preocupación por la lesión de Lucas Parisi.
El carrilero tuvo un fuerte choque con Leandro Valenti y quedó tirado, sin poder moverse y tomándose su rodilla izquierda. Se esperaba la peor noticia y se confirmó ayer: rotura del ligamento cruzado y lateral de la pierna izquierda, además tiene comprometidos los meniscos.
El jugador será operado en las próximas horas y se espera que la recuperación supere los siete meses.
Pero la de Parisi no fue la única mala noticia del post clásico, ya que Judelín Aveska también salió lesionado y está en duda para el partido del domingo ante Unión de Villa Krause.
El haitiano sufrió un esguince grado uno y tiene un hematoma importante en el tobillo derecho y se aguardará la evolución.
Entre las buenas noticias está que Carlos Sperdutti podrá contar con Marcos Benítez, quien ya cumplió con la fecha de suspensión que debía y podrá estar ante los sanjuaninos.
Esta semana será clave para saber que equipo pondrá en cancha el Cruzado para empezar a sumar de a tres.