Laura Muñoz aseguró hoy que "temía" que la maten por lo que sabía en relación a los vínculos de su ex pareja Alejandro Vandenbroele con el ex vicepresidente Amado Boudou y su supuesto testaferro María José Nuñez Carmona, en relación a un negocio en Formosa y a una "consultora" montada en Puerto Madero para otros "negocios" con el gobierno de entonces, según dijo al declarar ante el Tribunal Oral Federal 4.
Cuando Boudou quedó preso, la mujer, que vive en Luján de Cuyo, aseguró que "la Justicia avanza, investiga y nos va llevando hacia la senda de la verdad. Me parece bien que los que robaron estén presos, porque mientras están en libertad están gastando el dinero que fue de todos nosotros".
"Estoy rezando para que esta causa tenga un final en paz", añadió, y recordó que desde que denunció a su ex marido, "fueron años para mí muy duros", porque "la pelea fue totalmente desigual, para mí fue tremenda. Pensé que quizá yo no iba a llegar a este momento, pensé que no lo iba a poder ver".
Muñoz subrayó además que "ante cualquier cosa mi prioridad era proteger la verdad, por supuesto que a mis hijos y la vida. Pero proteger la verdad y no dejarme sucumbir por ninguna presión".Según recordó, "tuve que pasar por muchas pericias psicológicas y psiquiátricas, tuve que pasar por situaciones todas adversas y desconocidas para mí. Los códigos mafiosos a los que estaba expuesta para mí era un mundo desconocido. Por suerte tuve la fortaleza", y "estoy muy orgullosa de a pesar de todo, haber podido sostener todo esto", agregó.