El dólar a $60 terminó de deprimir un mercado que mostraba bajas desde mayo de 2018, "después de la primera gran devaluación", según señalaron los operadores de viaje consultados por Los Andes.
El paquete de medidas anunciadas por el presidente Mauricio Macri, que apuntan a aliviar a la clase media, y el diálogo político que sucedió a las PASO entre la actual conducción y los principales opositores, sirvieron para aquietar un poco el mercado, pero la incertidumbre continúa y "la gente va a esperar a hasta después de octubre para tomar cualquier decisión", incluidas las vacaciones. Y más si se tiene en cuenta que desde el lunes 12 de agosto (primer día hábil posterior a las elecciones) todos los pasajes y paquetes cuestan un 30% más.
Tras las elecciones, y de acuerdo con Daniel Ariosto, propietario de la agencia Travel Ritz y presidente de la Unión Industria y Comercial de Mendoza (UCIM), "el turismo emisivo se desplomó".
El empresario señaló que las ventas ya habían mostrado una merma en mayo del año pasado, cuando tuvo lugar la primera gran "corrida cambiaria".
Sin embargo, en esa oportunidad se hicieron evidentes más cambios de destino que opciones por quedarse en el país. "El que viajaba a Europa bajó a Cancún, el que iba a Cancún se fue a Brasil, y el que iba a Brasil se quedará en el país", señaló, para ejemplificar.
La contraparte la vieron en el lado del turismo receptivo, es decir en la afluencia de viajeros desde país de la región, europeos o estadounidenses, que aprovecharon en julio un tipo de cambio más conveniente para visitar la provincia. "En el mes de agosto normalmente el turismo baja (por temporada), pero para el verano el tipo de cambio va a favorecer a los turistas extranjeros", agregó el empresario.
Igualmente, según opinó Pablo García, presidente de la Asociación Mendocina de Agencias de Viajes y Turismo (Amavyt) el salto de la moneda extranjera significó un "parate" para la actividad.
La incertidumbre continúa en el sector, y estiman que una vez que se reacomode el mercado habrá un "horizonte más claro para trabajar".
Hasta el viernes, un paquete económico a las playas de Brasil costaba en promedio $55.800 (u$s 1.200) y, para el lunes, el precio en dólares no había cambiado, pero sí para alguien con salario en pesos
"Estamos esperando que se acomode el mercado, tener un horizonte claro para trabajar", señaló. Es que un paquete económico a las playas de Brasil, por ejemplo, cuesta en promedio U$S 1.200 desde Mendoza. Hasta el viernes ese monto equivalía a $ 55.440 (dólar a $46,20 en Banco Nación), pero durante la mañana del lunes saltó de golpe hasta los $ 72.000 (dólar a $60), es decir un 30% más.
En tanto que para los viajes dentro del país (argentinos para argentinos), de acuerdo con Ariosto, para esta temporada en los años anteriores ya comenzaban las consultas, pero las épocas electorales siempre traen incertidumbre. Y si bien hay consultas, la decisión final se tomará "después de octubre", con un panorama menos incierto.
Pasajes aéreos
Por tratarse de precios en dólares, las aerolíneas registraron la misma situación: los precios no cambiaron, pero sí para los argentinos, cuyos salarios no tuvieron un incremento del 30% en un día.
"Al estar nuestras tarifas publicadas en dólares y, consecuentemente, convertidas en pesos, cada una depende del cambio que se registre en el día", explicaron desde Sky.
Por su parte, desde FlyBondi consideraron que "es prematuro hablar de un aumento de tarifas", aunque explicaron que "teniendo en cuenta que el 60% de los costos de una aerolínea están en dólares, es probable que haya que adaptarse al nuevo valor".
"De todos modos las promociones diarias y semanales para todos nuestros 18 destinos siguen vigentes y se pueden encontrar excelentes tarifas low cost. Por ejemplo esta semana estamos con la campaña 'La ruta de la semana' y la ruta seleccionada es Buenos Aires-Tucumán, con tarifas de $650 finales por tramo", agregaron.
Igualmente, desde Norwegian señalaron que resulta prematuro observar realmente variaciones en la estructura de costos. Sin embargo, señalaron que no hubo ningún tipo de contratiempos con la venta de los pasajes.
Pasajes y estadía
Para hacer turismo interno pueden conseguirse actualmente pasajes "ultra low cost" desde $1.116,34 (Salta) o $1.700 (Iguazú) para diciembre o enero del próximo año, comprando con anticipación. En cuanto a alojamiento habrá que pensar un mínimo de $1.300 por noche (para un hotel con desayuno).
Si el plan es salir al extranjero, habrá que considerar al menos u$s 1.200 para pasar una semana en Brasil, u$s1.400 para Cartagena de Indias (Colombia), o u$s1.830 para Bella Vista (Panamá).
Consumos en el extranjero
Quienes compraron un pasaje antes del lunes y ya lo abonaron le ganaron a la devaluación, pero deberán considerar que los consumos en el destino elegido serán un 30% más caros que antes de las últimas PASO.
Así, por dar un ejemplo, en Brasil pueden comprarse dos hamburguesas (de una de las cadenas de comidas rápidas más conocidas) por R$15, o $211,21, mientras que en el país la misma compra significaría $198 (en ambos casos se trata de promociones especiales). Si bien no es mucho dinero, implica un gasto de un 7% superior, y antes de la devaluación, por el contrario, hubiera sido más económico comprar en ese país.
Adicionalmente, habrá que tener en cuenta qué valor toma la tarjeta de crédito cuando se realizan compras en el exterior, ya que la facturación se hará en dólares (sin importar si se trata de reales, pesos chilenos, soles o pesos mexicanos) y cuando se produzca el vencimiento de la tarjeta, los consumos se facturarán al tipo de cambio de ese momento y según la cotización que maneje el banco emisor del plástico.
Así, si se hubiera realizado una compra por u$s100 el 9 de agosto utilizando una tarjeta con vencimiento posterior al 12 de agosto, el comprador habría considerado un dólar a $46,20 y a la fecha debería hacerlo por alrededor de $59.
