Encantados
En el último tiempo, no eran pocos los que profesaban que el porcentaje de desencantados de Cambiemos venía creciendo, en virtud del malestar económico que reinaba en bastos sectores de la sociedad, Quienes sostenían dicha hipótesis, aseguraban que ello impactaría negativamente en el resultado electoral del gobierno nacional.
Sin embargo, dichos augurios quedaron sepultados bajo las urnas de las PASO. La primera novedad de esta elección es que Cambiemos mantiene cautivo el electorado que lo catapultó al poder en el 2015 y se consolida como un proyecto nacional, dispuesto a discutir seriamente la hegemonía peronista.
María Eugenia lo hizo
Muchas eran las dudas sobre qué iba a primar en el espíritu de los bonaerenses a la hora de emitir el sufragio. Quienes analizábamos el escenario electoral en el mayor distrito del país, nos preguntábamos si gravitaría la gestión de Macri o la de María Eugenia Vidal.
Lo cierto es que en todas las encuestas, la gobernadora superaba por varios puntos en imagen al presidente. Por tal motivo, Cambiemos tenía en términos de estrategia, una sola bala para dar el golpe de gracia al kirchnerismo: la figura de Vidal.
La gobernadora no esquivó el desafío. Le puso el cuerpo a la campaña y le disputó puño a puño la elección a Cristina Fernández de Kirchner, considerada por gran parte del círculo rojo, una imbatible.
Remontando la elección, Vidal no sólo le allanó el camino al presidente Macri para los próximos dos años de gestión, sino que le hizo el trabajo sucio a un peronismo timorato, que no supo o no pudo hasta ahora sacarse de encima a la ex presidente. Lo hizo de una manera sencilla pero efectiva. Apeló al corazón de los bonaerenses, pidiéndoles que no la dejaran sola. Y ellos no lo hicieron. La paridad de esta madrugada así lo demostraba.
El batacazo de turno
El electorado mendocino nos tiene acostumbrados a las sorpresas de última semana. No es la primera vez que un espacio nuevo irrumpe en el escenario y capitaliza algún malestar de época. En esta oportunidad, el Partido Intransigente, liderado por José Luis Ramón, supo capturar el voto de la clase media “antisistema”, que en 2013 llevar al FIT al Congreso nacional.
Con su batalla en defensa de los consumidores, los representantes de la ONG Protectora cosecharon adherentes entre los indignados con las boletas de gas y de luz que se distribuyeron en la provincia la última semana. Habrá que esperar a las elecciones de octubre, para ver si pueden emular la epopeya del FIT en 2013.
