Por cuarto año consecutivo se realizó el Baile de las Reinas. Esta edición tuvo lugar en el marco del evento 'Vendimia en el Bustelo', en el que también se pudo degustar vinos y comidas regionales. Las soberanas llegaron en autos antiguos. Además, se hizo una presentación en vivo del tema 'Que no pare'.
Desde temprano, el ministro de Turismo, Javier Espina, estaba parado en el ingreso principal para darles la bienvenida a los invitados. "Todos los años hemos intentado darle un formato distinto al Baile de las Reinas; este año decidimos que fuera más bien turístico", remarcó el funcionario.
El gobernador Francisco Pérez llegó junto a su mujer, Celina Sánchez. Además, concurrieron casi todos los intendentes y otros tantos ministros, entre ellos la encargada de la cartera de Cultura, Marizul Ibáñez.
Mientras la gente llegaba al lugar, se desarrolló un espectáculo de acróbatas aéreos y hubo artistas que caminaban entre el público: algunos vestidos de chef con zancos y otros con trajes de colores. Minutos después de las 21, comenzaron a arribar las soberanas en autos antiguos.
Las primeras en llegar fueron Sofía Haudet y Agustina Cano, Reina y Virreina nacional respectivamente. Sentadas sobre los respaldos de un convertible rojo, las jóvenes fueron recibidas por dos gauchos que las acompañaron al interior del Centro de Congresos y Exposiciones.
Posteriormente arribaron las representantes departamentales, compartiendo los coches de a dos o de a tres. Fueron presentadas ante los asistentes. Según confirmó Espina, en total se repartieron 1.500 entradas, entre las que retiró la gente en el Ministerio entregando una caja de leche en polvo y los invitados especiales.
La reunión dio inicio con un vals. Por primera vez, se decidió que las soberanas comenzaran a bailar con gauchos en lugar de sus respectivos intendentes. La decisión se hizo para evitar que las Reinas cuyos intendentes no asistieran sientan alguna diferencia con el resto.
Una vez comenzada la danza, se sumaron los jefes comunales o los representantes de las comunas, según el caso. Dejando en claro su valor simbólico, el Baile de las Reinas duró sólo un tema y se terminó. Inmediatamente las Reinas quedaron paradas en el centro de la pista que se había preparado para el caso y tanto los asistentes como la prensa se acercaron a hablar con ellas, filmarlas y fotografiarlas.
Para la Reina de Tupungato, Karen Vega, la experiencia fue "muy emocionante" y "superó todas mis expectativas". Entre foto y foto, Carla Videla, soberana de Luján, coincidió con Karen en cuanto a haber vivido un momento aún mejor de lo que esperaba. "Es hermoso contemplar a tanta gente que viene a verte, personas que son apasionadas de Vendimia", expresó.
Sobre el escenario fue interpretado en vivo el tema 'Que no pare', con las dos bandas que lo cantan y el Coro de Niños de El Pozo.
Desde un lado de la pista de baile, Marcela Gaua (Reina Nacional 1988), compartió el momento junto a su marido, el ministro de Transporte, Diego Martínez Palau. "Me encantó la idea de hacerlo en el Bustelo, porque puede albergar a toda esta cantidad de gente.
Además, está buenísimo que se pueda degustar vino y comidas locales", indicó. Con la entrada, los invitados contaban con cupones para degustar platos y vinos. Es que, además del baile, hubo stands de los ganadores de Best Of Mendoza Wine Tourism 2015 y las Rutas Gastronómicas.