Una familia de Tunuyán perdió su vivienda a causa de un incendio, ocurrido cerca del mediodía de ayer. Como no tenía papel, la dueña de casa utilizó nafta para prender la estufa y el fuego se propagó rápidamente, dejando en cenizas la casa prefabricada.
El matrimonio y sus cuatro hijos lograron salir enseguida de la construcción en llamas y se pusieron a salvo. Según información de la Policía, ninguno recibió heridas de gravedad. Sin embargo, ayer fueron trasladados al hospital regional Antonio Scaravelli para ser observados por los médicos, ya que inhalaron mucho humo.
El hecho ocurrió minutos antes de las 13. La vivienda, de la cual sólo quedaron cenizas, se hallaba entre las calles Chacabuco y Suipacha de Tunuyán. La familia tampoco alcanzó a salvar alguna de sus pertenencias o muebles.
Según fuentes policiales, la madre de los tres niños (de 12, 8 y 3 años) declaró que no podía encender una estufa a leña -estilo salamadra- y decidió utilizar una botella con combustible que tenía en su casa.
Algunas fuentes sostienen que habría sido uno de los pequeños el que provocó el siniestro. Lo cierto es que el combustible generó una explosión y las llamas alcanzaron velozmente las cortinas y los muebles. Pese a los intentos, la familia no logró detener el avance del fuego, que terminó por consumir hasta las paredes, construidas con material cocido y madera. Las pérdidas para esta familia son totales.