Con el esperado clásico a pocas horas de jugarse, la cabeza de Sebastián Méndez “trabaja” más que nunca. Está a full. No descansa.
Son horas de definiciones para el DT, pensando en diagramar el equipo titular que recibirá a San Martín (SJ). ¿Se decide por Ángel González o le da la chance a Fabián Henríquez? Es la gran pregunta en la Bodega por estas horas. Hoy el interrogante quedará enterrado y se sabrá quién saltará a la cancha.
“Tienen las mismas chances”, se escuchó decir en los pasillos de Coquimbito. Y es realmente así.
Los futbolistas viven diferentes realidades futbolísticas, pero los une un mismo camino: ambos son nacidos en las entrañas tombinas.
González tuvo más recorrido en las inferiores del club, y ya acumula varios partidos en Primera División (anotó ante Colón este campeonato). En la actualidad es una habitual pieza de recambio para el adiestrador.
El mediocampista le da mucha dinámica y verticalidad al equipo por las bandas. Hace daño con su velocidad y llega siempre al área contraria.
Para el pibe Henríquez (20 años) son sus pasos iniciales en el fútbol grande.
Su bautismo fue la temporada pasada contra Olimpo de Bahía Blanca (bajo la dirección de Gabriel Heinze) donde jugó pocos minutos. Después su actuación se circunscribió a la reserva, donde es una de las figuras del conjunto. También arrancó el partido en la final de la Copa Vendimia ante la Lepra.
Desde que Méndez se hizo cargo fue mirado muy atentamente por el cuerpo técnico, y consideran que viene progresando en su juego. “Está muy bien”, confían desde adentro.
En una semana especial previa por el derby, al zurdo se le abrió una puerta grande para ser parte del líder en el derby.
Y sí. Las joyas de la cantera brillan más que nunca.
G. Fernández: "No tenemos presión por estar arriba"
“Hace varios partidos que venimos jugando finales, ahora quedan cinco. Somos conscientes que no es un partido más ante San Martín, para nosotros, el club y la gente. Los clásicos se ganan, y lógico que queremos hacerlo jugando bien. Tenemos una idea muy clara y debemos respetarla, además que los hinchas se sienten identificados. Si jugamos como en el segundo tiempo ante Gimnasia, las fechas que restan, estaremos para pelear hasta el final. No somos promesa, somos realidad y hay que asumir las cosas como son. No tenemos presión, disfrutamos ser punteros del campeonato. No nos pesa estar arriba”