Sebastián Halpern ultima detalles de su viaje a Lima. Uno de los mendocinos que será protagonista del Dakar 2018 viajará hoy rumbo a Perú, donde se pondrá en marcha la competencia más exigente de esta especialidad.
De esta manera, regresará a la grilla de partida del Rally, en la categoría autos, junto a su navegante Eduardo Pulenta. Su camioneta, una Toyota Hilux alistada por el equipo South Racing, mañana tendrá la última sesión de práctica previa la revisión técnica prevista para la jornada del jueves.
La agenda es apretada, aún queda mucho por hacer, como ajustar detalles de cara a la largada de la competencia, pactada para el día de Reyes.
En el recorrido, de casi 4.500 kilómetros cronometrados, Halpern y Pulenta volverán a compartir el habitáculo de un rodado como sucediera en el lejano 2013, cuando finalizaron en el puesto 47.
De aquella primera aventura, debut para ambos como binomio, mucho cambió para el navegante a vela que logró -en 2011- el segundo puesto en un Quad Yamaha.
“La verdad es que tengo un poco de ansiedad y me gustaría poder largar ya”, le confesó hace algunas horas a MÁS Deportes, este piloto mendocino que lucirá el número 331 en su vehículo.
“Es una camioneta que conozco bien, corrimos las últimas tres ediciones del Desafío Ruta 40 y participamos en el rally la Baja Portalegre (en Portugal)”, agregó.
“Hemos crecido mucho deportivamente. Creo que tanto para nosotros como para el equipo que tenemos, un buen resultado sería poder estar en el Top 20 de la competencia”, señaló Sebastián, quien compartió las últimas tandas de entrenamientos en las dunas de El Nihuil -en San Rafael- con sus coterráneos y también dakarianos en la edición que se pondrá en marcha en la capital peruana, Bernardo Graue y Lucio Alvarez.
“Nos conocemos desde 2010 y nos hicimos muy amigos. Nos reunimos para entrenar en las dunas y también para hacer kilómetros recreando las acciones de carrera que propone el Dakar. Fijamos puntos de referencia, de paso obligatorio y trazamos una hoja de ruta para trabajar la navegación”, manifestó. “El último entrenamiento lo hicimos juntos, compartimos experiencias. Yo he aprendido mucho y también lo he utilizado para correr y progresar”, destacó Halpern.
“Conducir una camioneta y un quatriciclo es muy distinto no solamente por el tamaño de ambos vehículos, sino porque además tenés que pensar en el desgaste físico que demanda la carrera, en una categoría y en la otra. Con el Yamaha Raptor debía cuidar el peso, trabajar el balance y el equilibrio; además de una fuerte rutina de gimnasio para tonificar la musculatura requería muchas horas de entrenamiento sobre el quad. En la camioneta, por su parte, si bien trabajás en el gimnasio debés prestarle mayor atención a otros aspectos que tienen que ver más con lo que hacés en el volante”.
La Toyota Hilux de Halpern fue cambiando su fisonomía, sus colores, tal vez como una forma de marcar distintas etapas, de abrir nuevos círculos. Para esta competencia, en los costados, el negro ha ganando un gran protagonismo, complementando el blanco y verde con respecto a otras temporadas. El blanco de los veleros, su eterna pasión, y el verde de los Quads, a los que conoció en 1999 en carreras interminables. “Cuando tenía 20 años, no eran muchos los pilotos que pensaban en este vehículo, pero para mi la elección de los colores tiene que ver con cuestiones personales”, finalizó.
Algo personal
Nació el 22 de marzo de 1979, en nuestra provincia, es un piloto de la categoría cuatriciclos y también es regatista argentino. Este año competirá en la división camionetas, con una Hilux Se destacó a raíz de su desempeño en la edición 2010 del Rally Dakar, donde finalizó 6º, ganando dos etapas (3ª y 11ª), al comando de una Yamaha Raptor 700.
Un año después lograría subirse al podio con su Yamaha. Aficionado a los deportes de navegación a vela, en la categoría J-24 organizó el circuito nacional denominado la Triple corona. Fue subcampeón sudamericano en la clase de los veleros de casi 8 metros de largo.
Ligado a los deportes
“Siempre hice muchos deportes, desde muy chiquito. Básquet, pádel, entre tantos otros”, manifestó Halpern. A lo que agregó: “A los 13 años comencé a navegar a vela, he competido torneos nacionales en snipe y también en J-24. Eso lo hago hasta el día de hoy y es una de las cosas que más me gusta. Cuando largue el Dakar, por primera vez, quería largar y terminar. Y por supuesto estar lo más adelante posible. Pero realmente hicimos algunas cosas bien y otras muy mal. Aprendimos”.
Franco caime, entre los candidatos
El Dakar 2018 contará con 142 pilotos (68 argentinos) en la categoría de motos, entre ellos 28 inscritos en la modalidad más dura, sin asistencia alguna para todo el recorrido de 9.000 kilómetros entre Lima y Córdoba. Entre ellos estarán los mendocinos Franco Caimi y Leandro Bertona.
El británico Sam Sunderland (KTM), actual campeón del raid en motos, dijo que “probablemente hay diez pilotos capaces de ganar en la salida del Dakar”. Entre esa decena de favoritos también está incluido el australiano Toby Price (KTM), ganador del Dakar en 2016, Matthias Walkner, quien llega como campeón del Rally de Marruecos, y su compañero de equipo, el francés Antoine Méo. A bordo de las Yamaha aspirarán al título los franceses Adrien van Beveren, cuarto en el Dakar de 2017; Xavier de Soultrait, ganador del Merzouga Rally; y nuestro pupilo Franco Caimi, mejor novato del último Dakar con su octava posición. Por su parte, el chileno Pablo Quintanilla (Husqvarna) fue el piloto más regular de las dos últimas temporadas y será otro a tener en cuenta.
Dentro de los 28 pilotos sin asistencia, resalta la presencia del francés Olivier Pain, antiguo piloto de Yamaha, quien participó en diez ediciones del Dakar, de las que cinco las terminó entre los diez primeros. Los pilotos sin asistencia solo cuentan con un baúl con sus pertenencias, herramientas y repuestos para toda la carrera, y tienen prohibido recibir cualquier tipo de asistencia que no sea la de pilotos de su misma modalidad.