Entre los $ 5.700 millones de pesos que piden los radicales y los $ 2.100 millones que calcula el oficialismo necesitar para llegar a noviembre, hay más diferencias políticas que numéricas.
Una de ellas tiene que ver, básicamente con el sinceramiento de la deuda. Es que una de las promesas que hizo Pérez, al comienzo de su gestión, era llegar al déficit cero este año. Esta meta luego la ‘estiró’ al Presupuesto 2016, algo que hoy por hoy quedó en el plano de lo imposible. “¿Quién se quiere ir admitiendo un rojo de $ 5.700 millones?”, interpretaban en la oposición.
“La diferencia es que la deuda, en vez de tenerla con un banco, la toman con gente de carne y hueso, es decir, con los proveedores, con los municipios, con las retenciones salariales, con los sueldos de los empleados estatales. Acá sale perjudicado el conjunto de los mendocinos”, señaló Vaquié y dijo que la diferencia entre los números de cada uno es política.
“La Provincia gasta todos los meses entre 300 y 400 millones de pesos por sobre los ingresos que tiene. El tesorero general y el contador general, delante del ministro Gantús, nos dijeron que para cerrar el año necesitan casi $ 6 mil millones. Esos datos no los inventamos, nos los entregaron ellos”, reclamó Kerchner.
En realidad, Pérez quiere hacerse cargo políticamente de la mitad del endeudamiento de $ 5.000 millones que Cornejo pretende que pida. El resto, quiere que corra por cuenta de su sucesor.
