La sangría, a esta altura hemorragia, no para. Si el parámetro más explícito del aguante (a) Cristina del bloque de senadores del FpV fue la reunión a la que convocó la ex presidenta en el Instituto Patria, durante su fugaz y judicial paso por Buenos Aires, entonces el punto de partida fue 22. El número, que hoy causaría envidia, ya fue un síntoma de lo que podría pasar. Se trataba de uno más de la mitad del total (42) de la bancada que conduce Miguel Angel Pichetto, el gran ausente aquel día.
¿Los 22 que fueron a aquella cita de Cristina? Juan Abal Medina , Hilda Aguirre, Ana Almirón, Inés Blas, Carlos Espínola, Liliana Fellner, Anabel Fernández Sagasti, Marcelo Fuentes, Virginia García, Silvina García Larraburu, Sandra Giménez, Ruperto Godoy, Juan Manuel Irrazábal, Sigrid Kunath, María Labado, María Laura Leguizamón, Mirtha Luna, Juan Pais, Daniel Pérsico, María Pilatti, María de los Ángeles Sacnun y Marina Riofrío.
Aquel 21 de abril, hubo entre los asistentes -a alguno lo llamó Cristina a los gritos para que no faltara- pequeñas muestras de rebeldía. Sobre todo a la salida del cónclave y en el contacto con la prensa.
El encuentro venía con cola. Apenas tres semanas antes, a fines de marzo, 7 de esos 22 habían votado a favor del acuerdo con los holdouts. Fueron Blas (Chaco), Espínola (Chaco), Fellner (Jujuy), Irrazábal (Misiones), Kunath (Entre Ríos), Leguizamón (Buenos Aires) y Riofrío (San Juan).
Cada vez más, el núcleo duro se concentró en las mujeres. Cuando la ex Presidenta ordenó dar el debate por la ampliación de la Corte Suprema e instalar la idea de “igualdad de género” para el Máximo Tribunal, de los 14 senadores que firmaron el proyecto para sumar 8 integrantes al cuerpo la gran mayoría fueron senadoras.
Una de las que no lo hizo, y de alguna manera anticipó lo que sería su voto anoche fue Riofrío. Pero hubo otras que sí lo firmaron, como Blas, y finalmente apoyaron los dos pliegos de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz.
Así, el núcleo duro-duro, el que rechazó a los dos candidatos de Macri se redujo a 7 senadoras y un senador: Almirón, Fernández Sagasti, García, González, Labado, Pilatti Vergara, Sacnun y Marcelo Fuentes. Aguirre y Riofrío sólo votaron a Rosatti.
La votación se leyó en el Senado como un enorme triunfo de Pichetto, como articulador del PJ y los gobernadores en la negociación con el Gobierno, y la virtual desaparición del cristinismo-camporismo en el bloque del FpV. Aunque aseguran que la detención de José López no influyó en cambios de última hora, sí le dio escenario política a esta extinción.