La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, saludó los objetivos "ambiciosos" de Argentina para obtener un crédito stand-by, aunque destacó que el plan es responsabilidad del gobierno de Mauricio Macri.
"Como he dicho antes, el plan que sustenta la asistencia financiera del FMI está concebido e instrumentado por el gobierno argentino", advirtió la funcionaria francesa en una nota oficial del organismo.
Lagarde apuntó que Argentina formalizó la negociación con la presentación de una Carta de Intención y Memorándum de Políticas Económicas en que solicita al FMI un soporte de 50.000 millones de dólares.
De acuerdo con Lagarde, los objetivos económicos trazados por Argentina son "significativos y existe una articulación completa de las políticas subyacentes que ayudarán al gobierno a alcanzar sus objetivos".
El plan incluye "objetivos fiscales ambiciosos a mediano plazo" y metas de inflación "realistas que regirán la conducción de la política monetaria".
"Estos objetivos claros ayudarán a reforzar la confianza del mercado y abordar una gama de vulnerabilidades de larga data", apuntó la jefa del Fondo.
De acuerdo con Lagarde, el plan económico presentado por las autoridades argentinas constituye "una base sólida para el Acuerdo Stand-By de 50.000 millones de dólares anunciado la semana pasada".
Argentina, añadió, pidió que un tercio de ese valor se desembolse ya al momento de la aprobación del programa, y que la mitad de ese monto esté disponible para apoyo presupuestario.
El Directorio Ejecutivo del Fondo considerará la solicitud de Argentina el 20 de junio.
Sin embargo, en Buenos Aires el acuerdo con el FMI no fue recibido con el optimismo que se percibe en la carta de Lagarde.
La CGT convocó la realización de una huelga general par el lunes 25 de junio en rechazo a las medidas de ajuste implementadas por el gobierno y al acuerdo sellado con el FMI.
Otros sindicatos resolvieron un paro de 24 horas para el jueves y se sumarán al paro general del 25.
A cambio del auxilio, el FMI reclama eliminar el déficit fiscal de 3,9% del PIB en tres años. El gobierno reconoció que la austeridad afectará la obra pública y el PIB. Sólo hasta abril, el costo de vida suma casi 10% de aumento