Atento a que las reservas del Banco Central se convirtieron en los únicos fondos disponibles para pagar los vencimientos de la deuda en manos de acreedores privados, el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza, encarará hoy la compleja tarea para allanar el camino de la renegociación con el Fondo Monetario Internacional que deberá concretar el próximo Gobierno.
"Tenemos que recuperar acceso al mercado de crédito voluntario. No este mes, ni el que viene, no salir corriendo a renegociar una deuda, pero sí en el primer trimestre del próximo año tenemos que tener eso resuelto", insistió ayer.
Lacunza se ocupó de profundizar en público su visión sobre la crisis crediticia que afronta la Argentina en la antesala del encuentro que hoy mantendrá, escoltado por el titular del Banco Central, Guido Sandleris, con la nueva directora gerente del Fondo, la búlgara Kristalina Georgieva.
Palabras del Fondo
Ayer Georgieva habló del país. En una ronda con corresponsales dejó entrever que antes de volver a enviar dinero al país y de renegociar el acuerdo quiere conocer los planes de la próxima gestión.
"Estaremos muy interesados en ver cuál es el marco de política que se establece, y cuando tengamos eso podemos continuar esta conversación", sentenció Georgieva en Washington.
Hoy habrá un repaso de de los programas fiscales y monetarios. Con ello, Lacunza y Sandleris sondearán el ánimo del organismo para lo que será una segura renegociación del acuerdo.
Lacunza se mueve en un terreno de múltiples intereses, sujetos al tono de la campaña electoral. Pero se muestra comprometido a colaborar con la tarea que deberá afrontar el país en el corto plazo para retornar al financiamiento internacional.
Con esa voluntad también pareció involucrarse en los mensajes cruzados entre el Fondo y el candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, que se instaló como el favorito a partir de una contundente victoria en las primarias abiertas de agosto.
También en los últimos días el ministro trató de fijar los parámetros de la inminente negociación con los acreedores privados, sobre todo, ante las reservas que mantienen en el entorno de Fernández donde solamente se hacen referencias que no habrá quita.
