Daiana Macarena Albornoz Martínez es una de las dos internas del penal de El Borbollón que esta madrugada escaparon tras romper una reja. La mujer de 22 años es una vieja conocida de la Policía y de la Justicia. En 2016 fue recapturada ya que se había quebrantado su prisión domiciliaria.
El 24 de noviembre de 2016 Albornoz fue recapturada en el barrio Razquin de Godoy Cruz. Había violado su prisión domiciliaria y se había tiroteado con sus suegros, con quienes mantenía una disputa por la custodia de sus cuatro hijos.
A las 7 de la mañana de ese día, efectivos de la División Búsqueda de Prófugos llegaron a la casa 5 ubicada en la manzana "G" de esa barriada y recapturaron a la mujer. La joven había ingresado al Servicio Penitenciario el 16 de agosto de 2016 tras ser procesada por robo agravado por el uso de arma de fuego en poblado y en banda. El Tercer Juzgado de Garantías le otorgó la prisión domiciliaria.
La joven debía permanecer en la casa 14 ubicada en la manzana “E” del barrio Puesta del Sol de Godoy Cruz. Allí sería monitoreada a través de una tobillera electrónica. Pero Albornoz rompió el aparato el 4 de noviembre de ese año.
La semana anterior, Albornoz había denunciado a su suegro por violencia de género. Pero, como estaba prófuga, había radicado la denuncia con el nombre de su hermana. La relación con la familia de su ex pareja era conflictiva. El hombre está en prisión luego de que ella lo denunciara por ejercer violencia de género en su contra.
Días antes de sus detención, Albornoz había protagonizado un enfrentamiento a tiros en los cerros de la zona, fuera de la casa de sus suegros. Además tuvo una feroz pelea con su suegra por la tenencia de sus hijos.
Los sabuesos tienen acreditado que la joven madre formaba parte de una banda que se dedicaba a cometer delitos en el Oeste de Godoy Cruz.
Esta madrugada volvió a fugarse tras romper la reja de una ventana del sector I Anexo IV, que funciona dentro de la capilla que posee la unidad carcelaria. Estaba alojada allí porque estaba bajo un tratamiento de adicciones. Albornoz era compañera de Carolina Estefanía Segundo Villalva, quien también ganó la calle.
Al no contar con recursos necesarios para mantenerse en la clandestinidad, los investigadores creen que volverá tras las rejas en poco tiempo.
Un novio peligroso
Al momento de ser recapturada, Albornoz estaba de novia con un sujeto que había sido capturado el día anterior con un fusil. Cristian Romero también había quebrantado su detención domiciliaria.
El joven de 20 años caminaba junto a otros dos sujetos con un un arma de fuego tipo fusil calibre 22 con características similares a un FAL (fusil de asalto liviano) por el interior del barrio Razquin.
Fue detenido el 23 de noviembre de 2016 tras un intensa persecución. El detenido aportó datos falsos sobre su identidad pero luego se comprobó que era un prófugo.