“Buenas tardes, muchachos. ¿Me puedo sacar una foto con ustedes? Soy hincha fanático de Central y me quedé con las ganas de ver el partido de esta tarde”.
Los destinatarios del mensaje de Mariano son justamente tres mendocinos de pura cepa: Sebastián Moyano, Ezequiel Bonacorso y Sebastián Olivares, quienes, parados en la esquina del hotel ubicado en calle Corrientes, acceden a la instantánea (que termina sacando este cronista de Más Deportes), y de paso preguntan dónde pueden ir a tomarse un café.
Mariano (28 años, estudiante de Gestoría del Automotor) le tira las coordenadas y cuenta que tenía todo preparado para ir al Gigante de Arroyito con sus hermanos y que debido a la suspensión del fútbol tomó la determinación de “ir a cursar”. En todas partes del país, los hinchas sufren la abstinencia de más de 70 días sin fútbol. Los jugadores, también.
Hace un par de horas que la AFA comunicó la postergación del partido y el hotel Presidente luce semi vacío. Después de la suspensión, el DT Lucas Bernardi le dio asueto a la delegación -hasta las 19.45- y los futbolistas aprovechan para pasear por Rosario.
El capitán Rodrigo Rey, oriundo de la cercana localidad santafesina de Las Parejas, aprovechó para recibir la visita de familiares y amigos. El mismo camino siguieron Luciano Abecasis (quien debutó en Primera en Central) y el entrenador Lucas Bernardi, otro rosarino legítimo que se dio una vueltita por casa.
“Las horas no pasan más, no hemos hecho nada más que ver televisión y estar expectantes a las noticias”, cuentan Bonacorso, Moyano y Olivares, un rodeíno, un rivadaviense y un tunuyanino. Gentilmente, explican que no hablarán de manera formal porque acordaron con el capitán Rodrigo Rey que él sería el único encargado de hablar con los medios de prensa.
Paulatinamente los futbolistas comienzan a regresar al hotel. Diego Viera y Maxi Correa se sumergen en el ascensor y van en busca de la habitación. Al pasar, Chino Domínguez (Seguridad del plantel) le exige -en broma- al paraguayo que se ponga la remera de concentración, y el grandote responde con otro chiste. El Gallego Sallei (entrenador de arqueros) y Jorge Priotti (ayudante de campo) se acercan a dialogar no sin dejar de lado la mala sensación de regresar a Mendoza sin debutar en el torneo, algo que era necesario antes de afrontar el duelo del próximo miércoles ante Atlético Mineiro de Brasil por la Copa Libertadores de América en el Malvinas Argentinas.
A propósito de ello, Priotti se anima a aventurar un resultado para ese juego ante el cronista de TyC. “¡2 a 0 le vamos a ganar!, ¿me escuchaste?”, le dice levantando dos dedos de su mano derecha.
La noche empieza a caer en Rosario. Pese a la humedad, el clima es agradable. Uno por uno, los jugadores regresan a sus habitaciones para luego dirigirse al salón donde después de cenar emprendieron el regreso a Mendoza vía terrestre pasadas las 20:30.
Uno de los que llegó junto al ‘Cholo’ Benítez fue Washington Camacho, quien jugó en el Tomba cuando Asad dirigió al equipo por segunda vez y hoy es futbolista de Rosario Central.
“Nosotros abandonamos la concentración en Arroyo Seco el jueves a la noche porque ya sabíamos que no nos íbamos a presentar. De hecho, hoy (por ayer) entrenamos muy duro por la mañana”, reveló el uruguayo después de darse un abrazo con Olivares y Moyano, ex compañeros suyos en el Tomba.
Abecasis, Rey, Giménez y Garro también se acercan a saludarlo. Son las 19:45 en punto, hora de la cena. El zurdo los saluda y se funde en la noche rosarina. Luego de unos minutos, el plantel del Tomba se sube al colectivo que lo llevarán de regreso a Mendoza.
Definitivamente, la vida no es la misma sin fútbol.
Doscientos cincuenta mil peso sen gastos
Con la suspensión del partido consumada, una de las preguntas que muchos se hacían es ¿quién paga los gastos del traslado y la estadía de Godoy Cruz en Rosario? Según Carlos Guajardo, el gerente del Expreso, el que afrontará los gastos no es nadie más que el club.
Para tener una idea, la suma de lo que desembolsó el Tomba en concepto de traslado, comida y alojamiento asciende a los 250 mil pesos, que se desglosan de la siguiente manera: $ 70.000 en los aéreos de ida (2 mil cada uno por 35 pasajeros) y $ 60.000 en alojamiento y comidas.
Además, hay que sumar los dos colectivos que lo depositaron de regreso a Mendoza, que por más que el Tomba tenga canje con la empresa significan una erogación de $ 60.000 cada uno.
Mansur dijo que pedirán a la AFA que les reintegre los gastos en vano, más teniendo en cuenta que en algún momento Godoy Cruz deberá volver a Rosario para disputar este partido postergado.
Alvarado dejó Godoy Cruz y se fue a Defensa y Justicia
El defensor Pablo Alvarado dejó Godoy Cruz y se convirtió ayer en la segunda incorporación de Defensa y Justicia para afrontar el campeonato y la Copa Sudamericana 2017.
Alvarado, de 31 años, pasó sin pena ni gloria y terminó jugando sólo media temporada en el Expreso.
Así, tras la salida sorpresiva de Jaime Ayoví, el equipo de Lucas Bernardi sufre otra baja de último momento. De todas maneras, el DT no tenía muy en cuenta al ex central de Racing y San Lorenzo, entre otros.
Anteriormente, Defensa y Justicia había incorporado al arquero Ezequiel Unsain, con pasado en Newell's Old Boys.
De esta manera, Godoy Cruz pasó de tener seis marcadores centrales a contar con cuatro. La semana pasada el club se había desprendido de Gastón Suso, quien pasó a Estudiantes de Caseros.
Bernardi cuenta ahora con Diego Viera, Danilo Ortiz, Sebastián Olivares y Leonel Galeano.