María Laura disfruta con Benicio y Renata corretea y juega por la casa. Es la intimidad del Rey tombino. El lugar en el mundo de Rodrigo, su familia construida en Mendoza y por supuesto Godoy Cruz. Donde la felicidad invade cada rincón.
La gran figura del Expreso y héroe de la clasificación en la Copa Libertadores, le abre las puertas de su hogar a MÁS Deportes. Pase y conozca la "otra" vida del capitán.
Mucho queda de aquel flaco espigado que empezó a jugar en Las Parejas (Santa Fe) a este que triunfa en el Tomba: su humildad y las ganas permanente de crecer.
-¿Por qué arquero?
-Porque no me daba jugar en otro puesto. Probé de nueve por el físico y de cinco por mi viejo, pero un día me tocó el arco y me encantó. Encontré el lugar justo en la cancha.
El recuerdo de salir del pueblo para probar suerte en River (a través de Daniel Onega) es imborrable, una marca que quedará por siempre.
“No me costó porque era algo que deseaba, aunque fue difícil estar en una ciudad tan grande con 14 años. Extrañaba mucho y era duro, salía poco a la calle. Formamos una familia con los otros chicos del club”, cuenta el uno.
-¿Qué aprendiste?
-El fútbol te sirve para los otros aspectos de la vida, como pelear por una idea y hacer todos los días un esfuerzo en busca de un premio y el vivir con gente que no piensa como uno o tiene otros gustos, más en una edad difícil.
La juventud también estuvo ligada a un proceso único: las selecciones juveniles.
"Creo que no se toma dimensión de lo que estamos haciendo. Es muy difícil. El grupo se entrega al máximo".
-Son momentos imborrables...
-Sin dudas. Son momentos que guardo siempre, fueron cinco años desde la Sub 17 a la Sub 20, con un Panamericano (en México y con medalla de plata) y un mundial en el medio. Es lo más lindo que le puede pasar a un jugador, sin importar la categoría. Por eso cuando veo que un club no cede a algún futbolista, me da una sensación muy fea. Lo que se pierden esos chicos no se recupera más.
-¿En ese tiempo admirabas a alguien que después te tocó tenerlo cerca?
-En las juveniles de River miraba mucho a Juan Pablo Carrizo, y después cuando entrenaba como sparring de la selección mayor estaba él, Romero y Andújar. Practiqué con ellos y se aprende mucho.
Allá por 2014 Rodrigo desembarcó en la Bodega (con Jorge Almirón como entrenador) procedente de Newell's y con enorme trabajo se fue ganado un espacio de privilegio. Daniel Oldrá lo hizo debutar tiempo después, reemplazando a Sebastián Moyano, y la actualidad lo encuentra siendo figura y referente de un Godoy Cruz que sigue escribiendo capítulos gloriosos. "Necesitaba buscar un lugar en el fútbol, no todo era color de rosas. Había que salir a luchar y en el club se dio", explica sobre una entidad que lo cobijó y la cual le llenó el corazón.
“Me quería poner a prueba, y siempre agradezco a la institución por la chance que me brindó, sumado a que debuté en primera y hoy juego la Copa Libertadores. Me unen cosas muy lindas”, agrega.
-La gente te quiere y sos ídolo. Se nota que sos un tipo completo.
-Y acá encontré mi lugar en el mundo, si mirás dentro de mi casa te darás cuenta ...jaja (en relación a su esposa e hijos, los tres mendocinos). Mi mundo está en Mendoza, tengo todo acá. Al principio no pensaba en esto, pero es lo lindo que tiene la vida y las oportunidades que se presentan. Soy feliz acá, me gusta la provincia y la gente, estoy muy bien y eso suma para que uno se sienta cómodo todos los días.
-Pocos son los jugadores de Godoy Cruz que se han ido ovacionados de una cancha. Ante Libertad la gente se quedó a esperarte para gritar por vos y reconocer tu trabajo. ¿Caíste de lo que pasó?
-Y... Fue una noche mágica. Por todo que lo que se vivió en la cancha fue especial para mi. El cariño de la gente lo agradeceré de por vida. Lo que pasó contra Libertad es lo que uno sueña de chico, cuando empieza jugar al fútbol. Es el sueño del pibe.
"Siento que voy progresando en todo sentido. Es lo que busco todos los días. Será así hasta el último día de mi vida".
Un ping pong: ataja todo
El partido soñado: "Contra Libertad en la noche del jueves, sin dudas. Por todo lo que se vivió y porque el grupo escribió una página nueva en el club. Se hizo historia".
La mejor tapada: "Fue una contra Libertad, pero no la última del partido. Fue la de Salcedo en el primer tiempo (sacó la pelota de un ángulo con mano cambiada). Conversando con Lucho (Abecasis) me dijo sobre esa atajada. Era una pelota arriba y esquinada. En cuanto a lo emotivo, sin pensarlo la del final".
Amigos en el fútbol: "Son pocos, algunos con lo que comencé en River: los Funes Mori, Pezzella, Mauro Díaz y otros que no están en primera. Hoy en el club tengo a Luciano Abecasis, a quien conocí más en este tiempo. Me ayuda en el día a día".
El delantero más difícil: "El más complicado Fred (Mineiro), un delantero muy peligroso. Siempre te da la impresión de que si le das un metro te saca diferencia ".
Godoy Cruz: "Se me pone la piel de gallina cuando hablo del club. Marcó mi vida, hoy y para siempre. Me dio la chance de cumplir varios sueños, vivir del fútbol y tener un nombre. Y además de construir una familia. Disfruto cada partido de ponerme esa camiseta".
Un técnico: "De todos saqué lo mejor. Me marcó el Tata Martino en Newell's; es un DT con una gran capacidad. Seba Méndez es alguien muy importante en mi carrera, y Lucas Bernardi me transmite muchas cosas buenas en relación al rol como capitán. Y obviamente no dejo afuera al Gato Oldrá, porque me hizo debutar en primera y tomó los riesgos cuando yo no era nadie".
El gran sueño: "Jugar en Europa y poder tener la chance de estar en la Selección Argentina. Bienvenido sea si se cumple. Son mis sueños y espero, en el camino largo que me espera, cumplirlos".
Lionel Messi: "Entrené con él siendo sparring en la selección. Es de otro planeta. Lo sufrí porque me ca… a goles. Fue muy lindo y sobran las palabras; no me sorprende las cosas que hace porque lo viví de cerca dentro de la cancha".
Claudio manchado - ex arquero de Godoy Cruz: "No creo que esté mucho tiempo acá"
“Rey es un muy buen arquero, con muchísimo futuro. Tiene todo para seguir mejorando porque le quedan muchos años de carrera. El puesto es así, madurás de grande. Sin dudas que se ha convertido en un pilar fundamental para Godoy Cruz, tanto en el campeonato como en los partidos de Copa Libertadores. Hay que aprovecharlo y disfrutarlo porque me parece que no estará por mucho tiempo más acá. No es que le lleguen tanto, o que el equipo defeccione con respecto al sistema defensivo, sino que saca pelotas importantes. Son tres o cuatro atajadas decisivas en cada encuentro y eso potencia su figura, lo hace aún más importante”.