Esta enfermedad, que afecta las membranas que recubren el cerebro y la médula espinal llamadas meninges, puede causar graves lesiones cerebrales, discapacidad y en algunos casos la muerte. La meningitis meningocócica es más frecuente de lo que se cree; se estima que en promedio en nuestro país se produce un nuevo caso por día. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen anualmente alrededor de 500.000 casos en el mundo, de los cuales un 10% muere a causa de la infección. La forma más eficaz de prevenirla es mediante la vacunación.
Se trata de una enfermedad que afecta a personas de cualquier edad, y tiene como principal grupo de riesgo a los niños menores de 5 años, especialmente los lactantes en su primer año de vida. Entre los síntomas más frecuentes de la enfermedad se destacan fiebre alta, irritabilidad, sensibilidad a la luz, dolor de cabeza, vómitos, náuseas, confusión, rigidez de la nuca (que generalmente no se presenta en menores de 1 año) y manchas de color púrpura en la piel.
La meningitis meningocócica se asocia con alta letalidad (hasta un 50% en los casos no tratados) y con una elevada frecuencia de secuelas graves tales como daño cerebral, sordera, amputaciones de dedos o miembros y dificultad para el aprendizaje.
La meningitis por meningococo es producida por diferentes subgrupos de la bacteria. Los más frecuentes en la Argentina son el B, W, C e Y. La buena noticia es que la meningitis meningocócica se puede prevenir mediante vacunas que ya existen y que están a disposición de la población. De hecho, la Argentina fue el primer país en el mundo en incluir una vacuna contra la meningitis por meningococo grupos A, C, W e Y en el calendario de vacunación, y es gratuita y obligatoria para lactantes y adolescentes.
También existe otra vacuna para el grupo B que no está incluida en el calendario nacional de vacunación y que resulta igualmente importante aplicar para tener una protección más ampliacontra la meningitis por meningococo.
En la actualidad, los mayores desafíos que enfrenta la lucha contra la meningitis meningocócica son la detección precoz de sus síntomas para que el diagnóstico y el tratamiento puedan brindarse a tiempo, así como lograr altas coberturas de vacunación para una prevención eficaz. Por eso, es importante que recordemos cómo prevenirla y detectarla, para que más personas puedan ser tratadas a tiempo y sobrevivir a la enfermedad con una buena calidad de vida.