La UCR iniciará hoy el encuentro de legisladores y autoridades partidarias nacionales en la localidad cordobesa de Villa Giardino, en medio de un clima enrarecido por las diferencias internas respecto del rol del partido dentro de la alianza gobernante y su influencia en las decisiones del gobierno de Mauricio Macri.
En ese contexto, los radicales harán un “análisis” sobre la cuestión “económica, social, educativa y federal” y se debatirá sobre la “gestión política” del partido dentro de Cambiemos, según indicaron desde el Comité Nacional.
Si bien reconocieron la existencia de “voces disonantes y quejas de la gestión” de Macri, aseguraron que “nadie plantea la ruptura de la coalición” y, de lo contrario, se intenta “consolidar Cambiemos como una coalición política estable”.
Tras el encuentro, la UCR llevará luego el documento al Presidente y a los otros partidos de la alianza con “todas las expresiones que se puedan plantear” para que sea considerado como “un aporte” para la administración central.
“No hay que temer a la discusión; puede servir para que sea un aporte y un diagnóstico de las cosas que van bien y de las cosas que se pueden mejorar. Tenemos una mirada general de la situación social y económica del país y hay luces y sombras”, aseguraron.
El encuentro comenzará con la apertura del presidente de la UCR, José Corral, y continuará el sábado en el Hotel Luz y Fuerza de la localidad cordobesa de Villa Giardino y tendrá como invitado al ex ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay.
En las próximas elecciones legislativas, la UCR renueva 24 de sus 39 diputados nacionales, y en el Senado renueva tres de los 9 escaños que posee, por lo que no se descarta un pronunciamiento sobre la estrategia electoral aunque esa discusión se debatirá en abril en la próxima Convención Nacional.
La intención de los radicales es fortalecer la representación en el Congreso aunque saben que deberán acordar -principalmente- con sus socios del Pro y piensan que unas PASO pueden resultar poco beneficiosas para la alianza gobernante que necesita ganar la elección para impulsar sus proyectos y evitar depender del voto opositor.
El miércoles, un sector del radicalismo encabezado por el diputado nacional Ricardo Alfonsín, el ex vicegobernador de Santa Fe Jorge Henn, Juan Manuel Casella e Hipólito Solari Yrigoyen, buscó diferenciarse de la cúpula de la UCR al realizar una asamblea en el Comité Nacional y aprobar un documento para intentar promover el debate en el cónclave partidario del próximo viernes en Córdoba.
Tanto Casella como Alfonsín se preocuparon por aclarar que la movida no apunta a romper la alianza con el Pro y otros sectores de centro derecha “de ninguna manera”, sino que es una acción hacia “la Unión Cívica Radical para promover el debate interno, crear los ámbitos de discusión” e incidir en el cambio de orientación del gobierno que encabeza Macri, ante una consulta de esta agencia.
El tradicional encuentro del radicalismo tiene como objetivo “debatir sobre políticas de Estado y fijar la agenda parlamentaria para este año”, se expresó en un comunicado.
Allí, se desarrollarán tres paneles con la presencia de expositores que ofrecerán su visión respecto a la política nacional e internacional y economía y se realizarán dos talleres sobre educación y trabajo y la cuestión social.
"No es un año de hacer un paro nacional"
La cúpula del radicalismo se reunió con la CGT y le manifestó que el partido, que forma parte de la coalición gobernante, “no va a acompañar” la movilización sindical del 7 de marzo, aunque aclaró que la central obrera “está en todo su derecho” de llevar a cabo la marcha.
El presidente del Comité Nacional de la UCR, José Corral, recibió en la sede partidaria de Alsina al 1700 de esta capital a los jefes cegetistas Héctor Daer y Carlos Acuña, en el marco de los encuentros que la organización viene manteniendo con distintos sectores políticos de cara a la movilización.
"No es un año de hacer paro nacional ni este tipo de medidas, porque estamos comenzando a salir de las dificultades", dijo Corral.
Se trata del primer encuentro de la CGT con un partido oficialista, luego de que los opositores PJ, Frente Renovador y el socialismo adhirieran a la movilización, que será la antesala del paro nacional previsto para fines de marzo.
Por su parte, Daer aclaró que la CGT no fue al mitín a “buscar que la acompañen”, sino a “expresar” su “derrotero de diálogo” y las razones de la movilización. “Vinimos a ver el mapa de la realidad como la vemos todos los argentinos”, añadió.
