La salud de Matías Alé es un enigma

Tres clínicas en menos de un día, versiones contradictorias acerca del ataque a su mujer y muchos rumores sobre su cambio repentino.

La salud de Matías Alé es un enigma

El escándalo de Matías Alé continúa, y la salud del mediático sigue siendo un signo de pregunta. Mientras tanto, los medios del corazón (y los noticieros) ayer seguían repitiendo las imágenes dantescas de Alé tras la detención, en silla de rueda y amarrado, a raíz de que intentó agredir a su mujer y su suegra. El brote psicótico y el delirio místico provocó que gritara el nombre “María” y rezara el Padre Nuestro a viva voz.

Lo cierto es que en 24 horas, Alé pasó por tres sanatorios: ayer a la madrugada fue trasladado desde la Clínica Psiquiátrica de Internaciones Breves Avril hacia al Sanatorio Otamendi por un cuadro febril. Se supo que el actor estaba internado en una sala común, sedado. por causas que se desconocen. Recordemos que el martes a la tarde, el cómico había llegado a Avril desde el Sanatorio de la Trinidad, donde lo había llevado detenido la Policía.

El operativo de traslado al Otamendi, donde también se atiende la presidenta, comenzó minutos después de la 1 en la clínica Avril, ubicada en Humahuaca 3771. Desde allí una ambulancia de una empresa privada llevó al actor hasta el centro médico de Recoleta. El periodista de TN y el Trece, Javier Fabracci, que presenció el traslado , contó que Alé "fue subido a la ambulancia en camilla y totalmente tapado con una sábana hasta la cabeza".

¿Qué le pasó a Alé?

Luego del confuso episodio, habló Elena, la madre del actor, quien no estuvo en su casamiento. Reconoció que por motivos personales hacía un mes y medio que no veía a su hijo.

Eso se debía a que Alé estaba distinto: “Lo desconozco. No es un chico que se pelee, no agrede, concilia, siempre busca armonía. En este último tiempo hubo alguien que le acercó cosas que él antes no consumía”, afirmó. Y aseveró que en el último tiempo su hijo se había volcado a la religión.

Sus amigos más íntimos también notaron el cambio brusco en la vida de Matías. Uno de ellos es Guillermo Pelozatto, quien además es su abogado. "Noté un cambio, de verlo muy cansado y con una cercanía más espiritual", admitió sobre la personalidad del actor.

Algo muy parecido relató Juan Pérsico: "Estaba más raro, todo amor y paz. Pero siempre fue una excelente persona, un tipo súper sano, familiero. El cambio es haberse casado, por cómo se dio en tan poco tiempo sin haber convivido. De repente decía que era el amor de su vida, todo agarrado a la personalidad de María".

También salió a la luz la dieta que Alé estaba siguiendo, que le provocó una baja pronunciada de peso, y que apela a un producto en forma de polvito que se toma a diario. El sistema Pronokal, también conocido como “dieta del polvito”, es seguido por  Amado Boudou, Nancy Duplaá, Daddy Brieva y otros famosos y políticos. A pesar de los primeros rumores, han desmentido que este tipo de alimentación genere irritabilidad y mal humor.

Por su parte, Luis Ventura sugirió -sin dar mucho detalle- que había que buscar las razones del cambio repentino en la posibilidad de que una secta hubiera captado a Matías Alé. 
En este caso, como en tantos otros, rumores son lo que sobran...

"No fue un ataque"

María del Mar Cuello Molar, la flamante esposa de Matías Alé dio su versión de los incidentes ocurridos con su marido que terminaron con la internación de él. La joven negó que la haya agarrado del cuello y confirmó que todo el episodio se debió a un pico de estrés y que él estaba dispuesto a internarse.

“Simplemente tiene un pico de estrés -dijo a la salida de la clínica-. Sí, estuve con él recién. No me tiene que pedir disculpas por nada porque a mí no me hizo nada”. “¿Por qué vinola Policía? No sé, la llamaron los vecinos”, concluyó.

No obstante, en el acta policial, cuando los efectivos llegaron a la casa que el humorista tiene en la calle República de Eslovenia al 1900, en Las Cañitas, se encontraron con que Alé tenía a las dos mujeres agarradas del cuello, una con cada mano, contra la pared. El actor gritaba incoherencias y el personal policial "procedió a reducirlo” y él "en una actitud agresiva comenzó a arrojar patadas”, dice el acta.

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