El Vaticano busca calmar la preocupación sobre el estado de salud del Papa emérito Benedicto XVI, luego de que su secretario dijera que “es como una vela que se apaga lentamente”.
El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, dijo que el estado de Benedicto XVI no genera “preocupaciones en particular” para una persona que cumple 89 años el próximo mes. “Desde luego que es parte de los efectos de una avanzada edad y una fragilidad en su condición física que aumenta gradualmente, como en la de cualquier anciano”, añadió el reverendo Lombardi.
El secretario de Benedicto XVI, Georg Gaenswein, recientemente dijo a una revista italiana que el Papa emérito “está calmado, en paz con Dios, consigo mismo y con el mundo”.
