Vecinos que viven a los costados de la ruta provincial 82, desde Las Compuertas hasta Cacheuta, piden que la dependencia policial instalada en el km 21 de ese camino, comience a funcionar como subcomisaría.
Los residentes de esa parte de Luján de Cuyo sostienen que el flujo vehicular y de personas que registra la zona es muy grande y cuando se liberen las actividades tras el actual aislamiento social impuesto por la crisis sanitaria, el movimiento se notará aún más.
A partir de la apertura de la ruta y su conexión con el dique de Potrerillos, la vía de comunicación ha crecido notablemente en volumen de tránsito. Igualmente, y desde hace mucho tiempo, toda esa parte del departamento ha incrementado notablemente emprendimientos turísticos (cabañas, hostels, restaurantes, lugares al paso de comida, etc.), desarrollos inmobiliarios de diversas categorías y también se registra una importante residencia de personas, que eligieron ese territorio para vivir en forma permanente. En verano, es conocido el fenómeno que ha surgido por la utilización de la playa a la vera del río Mendoza, frente al km 25, lugar de esparcimiento que ya va por su cuarta temporada y es administrado por la Municipalidad de Luján de Cuyo.
En los tiempos en que la circulación de automotores sólo llegaba hasta el núcleo urbano de Cacheuta (puente colgante y alrededores), el área se cubría desde el punto de vista de la seguridad y el control del tránsito con un destacamento vial, emplazado en el mencionado km 22,5 y frente a la plazoleta Ruta 82, en Las Compuertas.
Posteriormente y a partir de la apertura de la conexión vial, la unidad pasó a funcionar como subcomisaría, pero no está suficientemente dotada de efectivos y parque automotor.
Hoy tiene esa categoría pero su servicio se ha reportado insuficiente para la mayoría de los habitantes del lugar porque, con el paso de los años, la estructura quedó chica frente a tantas demandas. Concretamente la existencia de uno o dos vehículos policiales y una dotación mínima de personal no dan abasto para cubrir las diferentes necesidades zonales, situación admitida por los propios oficiales en conversaciones informales con los pobladores.
Es verdad que habrá que esperar que se concrete en ese tramo del camino la reconstrucción de la ruta 82, obra ya empezada y que mejorará la fluidez del tránsito. Por sus características, influencia y diseño, la obra de mejora de la 82 se perfila para ser una de las realizaciones de infraestructura vial más notables de Mendoza de los últimos años. Entonces, cuando este trabajo se termine será útil levantar un edificio nuevo para la dependencia policial que supere la actual precariedad edilicia y se ponga a tono con el desarrollo zonal. El estado ideal es que se vayan haciendo las previsiones de proyecto y de inversión, para que llegado el momento se pueda concretar ese emprendimiento. Habrá que enfatizar que nadie pretende que estas materializaciones se concreten en breve, ya que la actual coyuntura no lo permite, pero es de buen administrador ir previendo los requerimientos y anhelos de la población del lugar para cuando la provincia recupere su dinámica y fuerza de trabajo.
