Productores ganaderos caprinos de la zona que cruza desde El Nihuil hasta Neuquén la Ruta Provincial 180 están prácticamente aislados porque esa vía de comunicación de tierra ha sufrido en varias de sus partes las consecuencias de las torrenciales lluvias de los últimos meses. En algunos tramos hay socavones de hasta 3 metros de profundidad.
Personal de la Dirección Provincial de Vialidad se encuentra trabajando en el lugar desde hace días porque los daños son de consideración y se calcula que recién estará liberada al tránsito desde la próxima semana y en vehículos altos como camionetas, pero no para automóviles. Esto, se aclaró en la repartición, si no se producen nuevas lluvias, que impedirían la continuidad de las tareas.
Los habitantes de estos alejados parajes del centro departamental también sufrieron en sus viviendas los efectos de las tormentas y en algunos casos pueden solucionar sus problemas trasladándose a caballo o en vehículos (son contados estos casos).
Casi todos permanecen prácticamente aislados hasta que se habilite la ruta. Afirman que deberían destinarse mayores recursos en el mantenimiento si es que no se resuelve mejorar este camino pero en la DPV, donde se reconoció la problemática, afirman que hay maquinaria destinada a esta ruta casi en forma permanente aunque también reconocieron que es insuficiente por su largo recorrido que incluye el tránsito por el lecho de ríos secos.
Muchas veces se ha hablado de la necesidad de asfaltar esta ruta considerada fundamental en la conectividad norte-sur desde su nacimiento en la ruta 144 a Malargüe en la zona donde se ingresa a El Nihuil (El desvío) hasta el límite con la provincia de Neuquén, pasando por Pata Mora. La traza es prácticamente paralela a la Ruta Nacional 40 varios kilómetros al este que es la vía que comunica también con la vecina provincia pero con una distancia mayor a los 140 kilómetros.
Por esa ruta también se accedía hace años a la mina Ethel abandonada hace tres décadas y es perpendicular a la rutas nacional 188 y a la 186 que lleva a la ciudad de Malargüe. También integra el espectacular recorrido al sur del humedal de Llancanelo y atraviesa prácticamente toda la Payunia. Desde su trazado pueden observarse grandes extensiones de tierra donde pastan guanacos y otros animales de la vida silvestre.
Esta ruta volvió a tener interés nacional y provincial cuando comenzó a desarrollarse en 2012 el fallido proyecto de la minera Vale Potasio Río Colorado ya que su recorrido permitía un acceso casi directo a través de la ruta 188 desde la costa atlántica y desde el sur de nuestro país y a la localidad neuquina de Rincón de Los Sauces donde se había reactivado la economía local debido a la presencia de cientos de trabajadores que se alojaban en ese pueblo pequeño junto al río Colorado.