Para todas las elecciones, sean primarias abiertas o generales, la Provincia paga la impresión de boletas en los tramos provincial y municipal. En las generales del 22 de octubre la provincia pagará más de tres millones y medio de pesos para la impresión de un juego de boletas equivalente a un padrón de electores en cada uno de los distritos electorales y departamentos.
Ayer salieron publicados los decretos 1.818, 1.819, 1.820, 1.821 y 1838, en los que el Gobierno se compromete a cubrir el costo de la impresión para que haya boletas en los cuartos oscuros de toda la provincia.
Los dos partidos mayoritarios, los frentes Cambia Mendoza y Somos Mendoza son los únicos que tendrán boleta completa en todos los departamentos y distritos, por eso es que el pago del Estado asciende a $ 965.297,35 a cada uno. Este costo es el proporcional correspondiente a las listas de diputados y senadores provinciales, así como también concejales en los 18 departamentos.
El proporcional correspondiente a los candidatos a diputados nacionales lo paga el Gobierno nacional.
Si sirve de consuelo, para las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), la provincia se gastó $ 10.730.855.39, para imprimir las boletas de todas las listas que participaron de ese comicio.
Hay explicación para tal monto: en esa oportunidad, en el frente oficialista Cambia Mendoza compitieron dos listas y en el frente del peronismo Somos Mendoza hubo tres, a las que se sumaron varias listas “cortas” de candidatos municipales y hasta algunas colectoras.
El partido que más fondos necesitó para la tarea de imprenta para la PASO fue Somos Mendoza con $ 4.151.735,06. Del otro lado, las boletas de Cambia Mendoza costaron $ 1.126.453,75: entre ambos espacios se llevaron casi el 50% del gasto en boletas.
A eso hay que sumarle las listas que se presentaron en las PASO y desistieron de competir o que no alcanzaron el piso de votos superior al 3%, por lo que no estarán en la general; tal es el caso del Partido Verde, Encuentro por Mendoza y Podemos con la Izquierda.
Volviendo al gasto de la elección general del 22 de octubre, claramente los dos frentes que más gastan son los que lideran la UCR por un lado y el PJ por el otro. Eso es así porque ambos tienen aspirantes a concejales en todos los departamentos de Mendoza, así como también listas de legisladores provinciales.
Distinto es el caso del Partido del Trabajo y el Pueblo (PTP), que sólo logró pasar el límite del 3% con sus candidatos a concejales de Malargüe, así que en las escuelas del departamento más austral de Mendoza, habrá una boleta corta cuya impresión le costará a la provincia $ 5.355,55.
El Partido Intransigente, que encabeza el candidato a diputado nacional José Luis Ramón, no tendrá boletas en todas las escuelas porque no alcanzó el piso del 3% en seis departamentos (Tupungato, Santa Rosa, La Paz, San Rafael, Alvear y Malargüe), ni tampoco en los legisladores del Cuarto Distrito (conformado por los tres departamentos del sur). Así es que el gasto en boletas para el PI sólo llega a $ 806.491,32.
El FIT tampoco tendrá boletas a concejales en los departamentos de Tupungato, Alvear, Santa Rosa y La Paz. Entonces el costo de impresión para la Provincia será de $ 945.630,51.
Un detalle: la Provincia sólo imprime el equivalente a un padrón para cada fuerza, que asciende a 1.407.748 electores. Generalmente los partidos más grandes imprimen más para repartir. A los más chicos, les alcanza sobradamente para repartir con lo que les otorga el Estado.