Aunque hay momentos de alegría y confraternización, la Villa Olímpica no está exenta de inseguridad. Ni siquiera de la que pueden provocar los propios deportistas. Ahora, la Policía civil de Río de Janeiro informó el arresto del boxeador marroquí Hassan Saada, acusado de abusar sexualmente de dos mozas.
El arresto temporal de Saada -inicialmente por 15 días- fue solicitado por el comisario Eduardo Ozório y aceptado por el Juzgado del Aficionado y Grandes eventos.
El boxeador, de 22 años, debía competir este sábado, a las 12:30, en la ronda de 32 de la categoría semipesado (hasta 81 kilos) ante el turco Mehmet Nadir Ünal.
El diario deportivo brasileño Lance contó cómo fueron las denuncias sobre el pugilista. Según la versión de este medio, una de las camareras pidió al deportista una selfie en su cuarto y este intentó besarla. La otra denunció que el africano la manoseó y ofreció dinero a cambio de tener relaciones sexuales.
Vale la aclaración: en Brasil, la ley considera delito de violación no solo los casos en los que hay penetración, sino también “actos libidinosos” con una persona en contra de su voluntad o contra un menor de edad. Estos últimos son los delitos que según la acusación fueron cometidos el último miércoles.
Según informó la policía en su sitio web, ya se informó del hecho al consulado de Marruecos en Río de Janeiro.
