River se quedó con el primer clásico del año, tras ganarle a Boca por la mínima diferencia en Mar del Plata, y en una semana volverán a verse las caras, pero en nuestra provincia.
En los primeros minutos el Millo parecía mejor parado y el trámite transcurría en el mediocampo del rival. Había mucha intensidad por parte de los dos. Dentro de ese panorama, con errores lógicos por tratarse de estos oponentes, la primera clara fue para los del Vasco.
En una contra iniciada por Lodeiro que abrió para Tevez, el Apache retrocedió para el uruguayo quien encontró en el camino a Maidana, quien desvió la trayectoria. Barovero debió estirarse mucho para evitar lo que pudo ser la apertura del marcador.
Con la disposición pensada, Tevez y Osvaldo jugaban a escasos metros y esperaban ser habilitados. En esos pasajes se jugaba más cerca del ‘1’ de River que de Orión, y la historia cambió en el minuto 10 cuando Silva metió más fuerte de lo debido sobre Mercado y Loustau decidió correctamente su expulsión.
El panorama y protagonismo volvió a cambiar. Para colmo de males para su equipo, Tevez le puso el brazo a un tiro libre de Mora y el pito, a instancia de su asistente, cobró la pena máxima. Pisculichi, con categoría, le cambió el palo a Orión y puso el 1-0. El nerviosismo xeneize era descomunal. El Apache y Osvaldo vieron la amarilla por faltas y airadas protestas.
Pérez y Meli también metían, por lo que River parecía que podía dar el golpe final en cualquier momento. Sin embargo quien convierte fue Tevez. En una contra, la estrella de Boca tuvo el empate y Maidana la mandó al córner. Eso fue todo en esos 45’ iniciales.
El reinicio de las acciones mostró a un Millo más seguro. Pisculichi no podía ser tomado y, a partir de su juego, su equipo se mantenía en las inmediaciones del arco contrario. Así las cosas y mientras el tiempo pasaba, Peruzzi fue mal contra el mendocino Martínez y el árbitro lo mandó a las duchas.
Con Boca sin ideas y River seguro del resultado, el partido fue mal jugado, aunque la violencia deportiva siguió presente. También se fueron expulsados: Cata Díaz y Maidana, y Pisculichi en el Millo. El primer Superclásico se había desvirtuado y dio la impresión que ninguno de los dos quiso jugarlo en los últimos minutos.
Así pasó el “gran primer” partido del año. Un derby que empezó siendo vibrante por las acciones del juego en ambos arcos, pero que lentamente se hizo violento y mal jugado. A los espectadores, propios y extraños, pero sobre todo del fútbol, seguramente les quedó el sabor amargo de un espectáculo deportivo que estuvo lejos de ser eso.
Infiltrado en Boca
Cuando la delegación xeneize hizo su arribo al Minella, la prensa se quedó dialogando con el conductor del micro que se mostraba bastante serio. Al ser consultado sobre el equipo del que es hincha, primero intentó asegurar que simpatizaba por los del Vasco pero, al notar que nadie lo observaba, se realizó La Banda con la mano.
Publicación desafortunada
En la previa al Superclásico, Nahuel Gallardo hizo una publicación poco generosa en una red social. El hijo del DT de River, que se crió en el club, es fanático y juega en las inferiores, escribió una agresión para los hinchas de Boca. “Son todos gordos p...y vigilantes, qué asco te tengo bos...”, publicó Gallardo hijo. Luego eliminó su comentario.
Estuvieron de estreno
Luego de muchas idas y vueltas, finalmente Carlos Tevez y Daniel Osvaldo tuvieron su primer encuentro juntos con la camiseta de Boca. Ya habían jugado en Juventus, pero anoche fue el estreno oficial para la dupla top del Xeneize. Por otro lado, Nacho Fernández también estuvo de estreno, aunque con la camiseta del Millonario.
