La policía de Hong Kong reprimió hoy una multitudinaria protesta antigubernamental en la que cientos de personas aprovecharon la celebración de Haloween para sortear la prohibición de usar máscaras.
Esta nueva protesta llega después de que el Comité Central del Partido Comunista Chino (PCCh) manifestara su intención de modificar el sistema de nombramiento de las autoridades de Hong Kong, tras un plenario de cuatro días en el que también se trató la cuestión de la seguridad y la educación en el territorio especial chino.
El director de la Comisión de la Ley Básica, Macao y Hong Kong, Shen Chunyao, aseguró en conferencia de prensa que Beijing buscará asimismo "mejorar el sistema jurídico" con el fin de "salvaguardar la seguridad nacional", aunque no aportó detalles sobre cómo procederá en estas materias.
Beijing también quiere "apoyar a Hong Kong en el fortalecimiento de la aplicación de la ley", agregó el funcionario, citado por la agencia de noticias EFE.
Entre los asuntos hongkoneses en los que el Gobierno de China demostró interés figura el de "fortalecer la educación en la Constitución y la ley básica, las condiciones nacionales, la historia china y la cultura china en Hong Kong y Macao, en especial entre funcionarios públicos y jóvenes, y mejorar la conciencia nacional y el patriotismo".
Las declaraciones de Shen llegaron un día después del plenario a puertas cerradas del PCCh, en el que se abordaron las líneas estratégicas de la política del país, entre ellas como afrontar la crisis gubernamental en Hong Kong.
Los manifestantes de la ex colonia británica quieren justamente lo contrario: que China deje de inmiscuirse en los asuntos de la región semiautónoma.
La protesta de hoy dejó la zona comercial de Causeway Bay cubierta de un densa nube de gas lacrimógeno, lo que provocó que los manifestantes huyeran y se reagruparan en zonas cercanas junto a otro grupo que había sido reprimido en el cercano Victoria Park.
Además, un grupo de manifestantes irrumpió en la sede local de la agencia de noticias oficial china, Xinhua, y rompió la puerta de cristal, hizo pintadas de color rojo en las paredes e incendió el vestíbulo del edificio, informó la agencia de noticias DPA.
La celebración de Haloween, que en la ex colonia británica tiene una considerable tradición, hizo que muchos de los manifestantes enmascarados se confundiesen con quienes solo buscaban divertirse y celebrar la jornada.
"La vida en Hong Kong ha sido muy tensa los últimos meses. Hoy es Halloween. Solo quiero pasarlo bien con algunos amigos, pero la policía no nos deja", dijo a la agencia Efe Wong Tai-man, de 17 años.
Y enseguida añadió: "Por supuesto esta máscara que llevo es una forma de protesta contra la brutalidad de la policía y nuestro inepto Gobierno".
Las protestas comenzaron a principios de junio en contra de un proyecto, ahora archivado, de extradición a China, pero con el paso del tiempo han virado hacia nuevas reivindicaciones, incluidas elecciones directas.
La decisión de la líder de Hong Kong, Carrie Lam, de prohibir las máscaras en las protestas fue leída como un ejemplo más de como se erosionaron los derechos desde que el territorio volvió al control chino en 1997, bajo el marco de "un país, dos sistemas".
Más de 3.000 personas han sido detenidas desde el inicio de las protestas.