"La Paz es un pueblo chico y no por eso está ajena al problema ambiental que generan las bolsas de nylon que, una vez usadas, se vuelven basura y se ven tiradas por todas partes y llevadas por el viento", dice Rubén Capdevilla, presidente del Concejo Deliberante, para justificar la ordenanza que el recinto acaba de aprobar en estos días, con lo que limita drásticamente el uso de esas bolsas para la entrega de mercaderías.
La norma entrará en plena vigencia el 15 de noviembre y durante estos meses previos, establecen mecanismos de difusión y concientización entre comerciantes y clientes, sobre la necesidad de eliminar el uso de la bolsa de polietileno y polipropileno de la mayoría de los negocios.
"Sólo vamos a hacer excepciones en el caso de la venta de alimentos húmedos, como pueden ser la carne y el pescado", explicaron desde la comuna, que apuesta a volver al uso de los tradicionales bolsos de compra de lona o tejidos, también de cartón e incluso de material vegetal.
En el municipio están confiados en que la prohibición será acompañada por la mayoría de los vecinos y, de hecho, ya se han realizado reuniones para dar a conocer la nueva reglamentación.
"Yo estoy de acuerdo y no sólo por el cuidado ambiental sino también por lo económico", dijo la dueña de una importante verdulería del pueblo: "En mi caso, el gasto en bolsas de nylon que tengo es muy grande y más alto incluso, que lo que pago de alquiler por el local".
La nueva ordenanza prevé advertencias, multas e incluso inhabilitaciones temporales para aquellos locales que no cumplan con la medida. "Vamos a ser estrictos con las inspecciones y el que no se acomode a la nueva disposición será sancionado", aseguró Capdevilla.
La ordenanza que prevé la eliminación casi total de las bolsas de polietileno de los comercios de La Paz, es de alguna manera complemento de un programa ecológico anterior, que el departamento puso en marcha en 2013 y que busca reducir la cantidad de residuos plásticos, con la ayuda de las escuelas paceñas.
"Es un proyecto que surgió a partir de la propuesta de la escuela Ferrocarriles Argentinos, que presentó la idea en una feria educativa departamental", comentó el jefe comunal paceño, Gustavo Pinto, que luego detalló: "Los alumnos juntan los plásticos y botellas que hay en sus casas y los llevan a sus escuelas; luego nosotros pesamos todo ese material, lo retiramos de los contenedores y le entregamos a la directora un recibo por los kilos que han recolectado, para que ella cobre el dinero en la comuna y disponga qué hacer en la escuela con la plata ".
Oscar Sívori es referente en la zona Este de las agrupaciones ambientalistas y fundador de Ciudadanos Antiplástico, un grupo de vecinos que desde hace algunos años, sale periódicamente a las calles de San Martín para limpiar de plásticos los espacios verdes, los caminos y las acequias.
"En principio, lo que está haciendo La Paz tiene mucho mérito, pero para que el resultado tenga sentido hay que insistir en el tiempo y dar al cliente una alternativa a la bolsa de nylon".
"Hemos repartido algunas bolsas biodegradables y vamos a seguir con esa práctica, pero apuntamos a que recuperemos la costumbre de llevar nuestra bolsa al comercio", cerró Capdevilla.