Basta con ver el video en el que un grupo de líderes se burlan supuestamente de Donald Trump para entender que las relaciones entre algunos miembros de la OTAN y Estados Unidos no pasan por su mejor momento.
Todo indica que el presidente estadounidense ha perdido ese carisma incondicional de los primeros tiempos de su gobierno, que lo hacía invulnerable a cualquier tipo de críticas, cuando se discutía el rumbo que debía tomar la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Aun así, el jefe del a Casa Blanca conserva toda la fuerza de su ego.
En la cumbre de la OTAN de la semana pasada en Londres, por otra parte, fue el presidente francés Emmanuel Macron quien pareció asumir un rol más activo que la canciller alemana, Angela Merkel, enfrentándose a un Trump que estaba lejos de aceptar cualquier tipo de broma.
Antes de la reunión, la jefa del gobierno alemán había asegurado que la Alianza Atlántica debe preservarse porque Europa aún no es capaz de defenderse sola, concepto que la aleja del proyecto de defensa europeo que busca Macron.
Lo cierto es que Berlín depende militarmente de la OTAN, mientras que la seguridad de Francia descansa en su poderío nuclear, ya que cuenta con alrededor de 300 ojivas atómicas desplegadas en su territorio, según un informe de la Federación de Cientistas estadounidenses (FAS).
Los 29 socios de la Alianza Atlántica, creada para contrarrestar los efectos de la otrora Unión Soviética, hoy Rusia, celebraron sin mucho brillo los 70 años de vida de esta organización estratégica.
Sin embargo, el clima estaba enrarecido por unas declaraciones que hizo previamente el presidente francés a la revista británica The Economist, en las que afirmó que la OTAN está en un estado de "muerte cerebral".
Acosado por los demócratas que pretenden llevarlo a un juicio político por abusar del poder de la Casa Blanca para favorecer su reelección en 2020, Trump calificó de “insultante” las criticas de Macron.
Para colmo, después se conoció un video captado durante una recepción que ofreció la reina Isabel II de Inglaterra en el palacio de Buckingham, el martes por la noche.
Allí se ve al presidente de Francia junto al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y al británico Boris Johnson y al holandés, Mark Rutte, riéndose de algo que probablemente tiene que ver con Trump y sus prolongadas conferencias de prensa.
Críticas
Seguidamente, el mandatario estadounidense dijo que Trudeau "tiene dos caras", y criticó que no gaste lo suficiente en defensa para la Alianza Atlántica.
La edad siempre es un factor importante. Trump, con 73 años, se veía algo molesto con sus socios cuarentones y cincuentones que no dudaron de burlarse de algunas de las obsesiones del magnate estadounidense. Por ejemplo, sus largas conferencias de prensa. Así, sin dar explicaciones, suspendió un encuentro con los periodistas y regresó a Estados Unidos.
Juan Battaleme, director de la Maestría en Defensa Nacional de la Universidad del mismo nombre, sostuvo que "esta cumbre de la OTAN tenía más que ver con celebrar los 70 años que con encontrarle una misión que ponga al artículo 5 (defensa colectiva) en perspectiva del siglo XXI".
“Por ejemplo avanzaron en el tema del uso militar del Espacio e impulsaron una mejor cooperación en el ámbito digital. También establecieron el 2024 como fecha para que todos los miembros alcancen la cuota del 2% del gasto del PBI en defensa, así como desarrollar una alianza mas proporcional en términos de tareas militares”, señaló este especialista.
Battaleme explicó que “los desacuerdos aparecen en relación a consideraciones sobre Rusia, China y el accionar de Turquía, mientras que Europa del Este presiona para tener una posición más activa en contra de Rusia”.
Señaló, además, que Francia y Alemania e Italia ven el norte de África y Medio Oriente como algo problemático, pero no obstante desean tener una mejor relación con Rusia.
De todos modos, el secretario de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, advirtió que la OTAN responderá al despliegue ruso de nuevos misiles con capacidad nuclear en suelo europeo.
En el documento final resaltaron que “un ataque contra un aliado será considerado como un ataque contra todos”, lo que reafirma el artículo 5 de la Alianza.
La cumbre dejó la impresión de que muchas diferencias subsistirán en el tiempo, más allá de los apetitos personales de algunos líderes mundiales, entre ellos Trump, Macron y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Otro aumento en el presupuesto de defensa
El secretario general de la Otan, Jens Stoltenberg, anunció un aumento conjunto de los presupuestos de Defensa de 360.000 millones de euros en los 29 estados miembros hasta 2024. El anuncio se produjo horas después de que Trump tachara de “morosos” a los países que no destinan el 2% a sus gastos de Defensa.