El Comité de Defensa de la Democracia (Conade), organización opositora al presidente de Bolivia, Evo Morales, reclamó ayer la anulación de las elecciones generales del domingo 20 y llamó a una huelga general por tiempo indefinido para "defender la democracia".
Mientras tanto, el gobierno volvió a negar la posibilidad de que haya habido fraude electoral, y reiteró que el sistema de control, conteo y validación de votos es "infranqueable".
"Dada la realidad de un fraude electoral, el Conade exige la anulación de las elecciones y un nuevo tribunal electoral, esta vez imparcial, y realizar nuevas elecciones", dijo la organización en un comunicado.
En tanto, el ministro de Justicia, Héctor Arce, sostuvo que "en Bolivia el sistema de control electoral infranqueable".
Así "se dejó claramente establecido" en las reuniones que, junto al canciller, Diego Pary, mantuvo el viernes con los secretarios generales de la ONU, António Guterres, y la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, afirmó Arce.
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) publicó el viernes el resultado de los comicios con 100% del escrutinio cumplido, que atribuyó a Morales el triunfo en primera vuelta ante el ex presidente Carlos Mesa, al haberlo superado por más de 10 puntos porcentuales (47,08% a 36,51%). Agencia Télam.