La Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera que los recientes movimientos populistas amenazan los derechos humanos con discursos de odio cargados de "retórica del fascismo" cuando "el logro más grande de la comunidad internacional desde el final de la Segunda Guerra Mundial ha sido la construcción de un sistema internacional de derechos humanos".
Esto es parte de mensajes por el Día de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre, una fecha que conmemora la adopción de la Declaración Universal sobre esos principios adoptada por la Asamblea General de Naciones Unidas, en 1948.
Los voceros han sido un grupo de 76 expertos independientes de la ONU y el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, que difundieron sendas declaraciones con motivo de la fecha. Los 76 expertos en garantías imprescindibles afirmaron que "un viento frío está soplando en gran parte del mundo y la misma noción de derechos humanos está bajo un creciente ataque.
Los llamados movimientos populistas están invocando el nacionalismo y el tradicionalismo para justificar las formas racistas, xenófobas, sexistas, homófobas y otras formas de discriminación flagrante aprovechando también las dificultades del actual clima económico", apuntaron.
Los especialistas en la materia añadieron que "el discurso de odio que apunta a incitar a la violencia, la hostilidad y la discriminación está aumentando dramáticamente, al igual que la violencia contra mujeres, niños, grupos étnicos, religiosos, personas con discapacidad, minorías sexuales, migrantes y muchos otros grupos.
Cada vez más gobiernos están recurriendo a tecnologías más intrusivas que sistemáticamente integran y explotan los medios de vigilancia masiva que amenazan toda una gama de derechos humanos fundamentales. En muchas partes del mundo, estos ataques contra los derechos humanos están siendo reforzados por los ataques contra el movimiento de derechos humanos", apuntaron.
"Tenemos miedo"
Por otro lado, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, aseguró que "2016 ha sido un año desastroso para los derechos humanos en todo el mundo" y que "la presión sin precedentes" sobre las normas internacionales "amenaza con desenredar el conjunto único de protecciones establecido después del final de la Segunda Guerra Mundial".
En un mensaje con motivo del Día de los Derechos Humanos, Zeid indica que "muchos de nosotros tenemos miedo de la manera en que el mundo está siendo dirigido".
"Los movimientos extremistas someten a la gente a una violencia horrible. Los conflictos y las privaciones están obligando a las familias a abandonar sus hogares. El cambio climático oscurece nuestros horizontes. La discriminación, las abrumadoras disparidades económicas y el despiadado deseo de obtener o mantener el poder a cualquier costo son los principales impulsores de las actuales crisis políticas y de derechos humanos. Los valores humanos están atacados y mucha gente se siente abrumada sin saber qué hacer ni adónde dirigirse", explicó.
Zeid sostiene que "muchos líderes no están logrando lidiar de manera efectiva y honesta con estos complejos problemas sociales y económicos", lo que empuja a la gente a volverse "desesperada hacia las voces de sirena que explotan temores, siembran desinformación y división, y hacen promesas seductoras que no pueden cumplir".
"Pero hemos aprendido, a través de las amargas lecciones de la historia, que la humanidad sólo sobrevivirá y prosperará si buscamos soluciones juntos. Los derechos humanos pretendían ser y siguen siendo el antídoto para todo esto: todos tienen derechos -derechos económicos y sociales, así como civiles y políticos, y el derecho al desarrollo- y es el momento de defenderlos", apuntó el alto comisionado.
Ejemplo rotundo
Recalcó: "En este sentido Siria es el ejemplo más rotundo de fracaso en todos los ámbitos", al verse sumida en "un conflicto que era totalmente evitable" si su presidente, Bachar el Asad, hubiera escuchado a "quienes protestaban pacífica y legítimamente contra las violaciones de los derechos humanos".
"¿Los resultados? El fortalecimiento de Daesh y otros grupos extremos, que luego estimularon otra guerra y abusos masivos -incluyendo probablemente el genocidio- en Iraq. El uso repetido de armas químicas. Un vasto movimiento de refugiados sirios, que invadieron la capacidad y la buena voluntad de los países vecinos y se volcaron en Europa, donde la rapidez y la magnitud de la afluencia provocaron temores que se mezclaron con las tensiones económicas existentes y el sentimiento anti-extranjero", apostilló.
A este respecto, lamentó que "la retórica anti-extranjera, llena de veneno y odio desenfrenados, está proliferando hasta un grado espantoso y es cada vez más incontestable" en algunas partes de Europa y en Estados Unidos.
"La retórica del fascismo ya no se limita a un submundo secreto de los fascistas, que se reúne en clubes mal iluminados o en la 'Red Profunda' (webs no indexadas por los motores de búsqueda). Se está convirtiendo en parte del discurso cotidiano normal".
"La armonía de un mundo interconectado"
El secretario general de la ONU dijo en un mensaje por la celebración que "defender los derechos humanos es interés de todos.
"El respeto de los derechos humanos promueve el bienestar de las personas, la estabilidad de las sociedades y la armonía de un mundo interconectado", señaló el surcoreano Ban Ki-moon, de 72 años, quien ejerce desde 2007 como el octavo secretario general de las Naciones Unidas.