María Fernanda, la nena con síndrome de Down de Malargüe a la que se le había negado la primera comunión, ayer pudo cumplir su sueño al recibir el sacramento, según publicó diario El Ciudadano del Sur.
La pequeña de 11 años se hizo conocida luego de que su madre denunciara que la Iglesia no le había permitido tomar el sacramento, pese a que María Fernanda había asistido dos años a catecismo en la escuela Rufino Ortega de Malargüe y tres meses a una catequista particular.
Al parecer, el sacerdote Luis Sanjurjo de la parroquia Nuestra Señora del Rosario, había considerado que la niña no estaba en condiciones para hacerlo.
Finalmente, y después de muchos días de polémica, la parroquia reconoció que la nena tenía que ser parte de ese acto junto a sus compañeritos, y pudo tomar la primera comunión. Acompañada de su familia y con una sonrisa que impregnó de amor la foto, María Fernanda cumplió su sueño.