A pesar de la fresca mañana del jueves y la amenaza latente de la lluvia, sobre la ciclovía de calle Belgrano –que conecta Capital con Godoy Cruz– se ven pasar varios ciclistas.
Algunos van apurados para llegar al trabajo, otros transportan elementos, mientras que un tercer grupo va relajado aprovechando de su tiempo libre.
Muchos de ellos llevan casco, aunque hay otros tantos que no, a pesar del temor de ser sancionados. Es que hace poco más de un año (el 13 de diciembre de 2017) entró en vigencia la nueva ley de Seguridad la Vial de la provincia que introdujo las multas a los conductores de bicicletas y estableció la obligatoriedad de circular en este vehículo utilizando casco homologado (artículo 44).
En este período la Policía Vial colocó en toda la provincia un total de 50 multas por incumplir esta imposición, lo que representó el 0,03% del total de actas realizadas en los distintos rubros (153.675) durante lo que va del año. Este pequeño porcentaje se debe a que, tal como aseguran, todavía se encuentran en una etapa de concientización y educación a la sociedad. Sin embargo dentro de este pequeño número de infracciones, dos casos saltaron a la luz (en julio en Maipú y la semana pasada en Rivadavia), por errores en los montos cobrados.
Si bien no circular con casco en bicicleta supone una sanción leve de $960 (que se reduce a $560 si se abona de forma voluntaria), en ambos casos las actas que se labraron superaban los $9.000 por estar tipificadas como multas por circular sin casco en moto. Tras conocerse el error a los dos multados se les devolvió el dinero cobrado de más.
Educar a los ciclistas
Al dar a conocer la totalidad de multas colocadas a bicicletas en lo que va del año, el jefe de la Policía Vial de Mendoza, Oscar Hómola, explicó que con este vehículos están teniendo cierta consideración. "Actuamos con cierta cautela para no salir a hacer sanciones porque no tiene sentido, queremos educar y concientizar", manifestó. Para él, el objetivo es seguir fomentando el uso de la bicicleta, pero bajo normas de seguridad.
“Está demostrado que cuando se usa el casco como corresponde, abrochado debidamente, se mejoran los estándares de seguridad”, expuso.
En cuanto a los motivos de las multas, remarcó que la totalidad se colocó por no usar este elemento de protección, aunque aclaró que también son objeto de sanción los ciclistas que no lleven las luces correspondientes (blancas delanteras y rojas traseras), así como los que circulen sin respetar la normativa vigente. "Deben pararse en los semáforos, no andar en contramano, ni usar las veredas, entre otros", enumeró el funcionario.
Si bien no se multó a los ciclistas de forma masiva, Hómola aseveró haber comenzado a observar mayor uso del casco. "Yo estimo que estamos cercanos al 50% que lo usa y un 50% que no", dijo. Entre este segundo grupo comentó que aducen problemas económicos para adquirir el elemento –que tal como precisó se consigue desde $400–, que les produce incomodidad, así como falta de interés. "Estos últimos dicen que nos les sirve para seguridad pero nosotros insistimos en que en caso de accidente va a atenuar la consecuencia de algún tipo de golpe", subrayó.
Aporte municipal
Más allá de las sanciones que coloca la Policía Vial, cinco municipios que tienen sus juzgados de tránsito también pueden labrar infracciones. Consultados al respecto explicaron que no están colocando multas a los conductores de bicicletas pero que están llevando adelante campañas para que se adecúen a la norma.
Desde Maipú informaron que están en una etapa de prevención, concientización y educación por lo que hasta el momento no han multado a ningún ciclista. De todas formas aclararon que deberán comenzar a hacerlo tal cual lo estipula la ley.
Mientras desde Godoy Cruz, explicaron que el cambio de la ley implica una modificación en el comportamiento de las personas al que hay que adaptarse. Por esa razón están realizando una campaña de concientización en la ciclovía del departamento en la que informan la obligatoriedad del uso del casco y de las luces y en la que reparten chalecos refractarios.
En San Martín se manifestaron de modo similar. Desde allí señalaron que están actuando de modo preventivo con los conductores de bicis y que se realizan operativos que tienen como principales destinatarios a quienes circulan en auto.
En contra del casco
Al cumplirse poco más de un año de la nueva ley de Seguridad Vial desde la organización Pro Bici, que nuclea a ciclistas urbanos de Mendoza, siguen reclamando que se derogue la obligatoriedad del uso del casco. "Conocemos personas que han dejado de utilizar la bicicleta por temor a una multa, todo lo que nosotros dijimos en el texto que publicamos hace un año explicando por qué no es necesario utilizar el casco en ciclismo urbano, se está confirmando", aseguró Lucas Burgos, licenciado en Gestión Ambiental y miembro de la organización.
Remarcó que el casco obligatorio es un claro desincentivo al ciclismo urbano de Mendoza. "Y esto tiene una afectación mayor en los sectores más vulnerables que encuentran en la bicicleta una forma sostenible de moverse", se lamentó. Burgos también mencionó los casos en los que se multó de forma exagerada. "Se están cometiendo abusos que muestran afán recaudatorio. La excusa del error pudo ser aceptada una vez, pero en la segunda vez está claro que no es un error", dijo.
Asimismo contó que han intentado contactarse con funcionarios del gobierno provincial para hablar al respecto y que no han tenido respuesta. “En todo momento buscamos diálogo y alternativas para que el desarrollo del ciclismo urbano no se vea comprometido por esta ley que es un auténtico palo en la rueda”, subrayó.
A tener en cuenta
Ley Nº 9024 de Seguridad Vial
Art. 44° Para circular en bicicleta, con o sin motor, será necesario que:
1. Sus conductores y ocupantes usen casco de seguridad homologado.
2. Lleven instaladas una luz blanca hacia adelante y otra roja hacia atrás.