La empresa estadounidense Ocean Infinity, conocida por participar en la infructuosa búsqueda del avión de Malaysia Airlines desaparecido en 2014, fue la elegida para rastrear el océano Atlántico en busca del ARA San Juan perdido desde el 15 de noviembre pasado con 44 tripulantes a bordo.
El sitio web oficial que difunde el seguimiento de los procesos de licitación del Estado divulgó el dictamen de preadjudicación a la compañía, que se hará definitivo si en los próximos días no se presentan objeciones.
La adjudicataria tomó relevancia al participar de la búsqueda del avión del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, desaparecido en 2014 en el océano Índico con 239 personas a bordo, sin que todavía se haya encontrado el aparato, lo que lo convierte en uno de los mayores misterios de la historia de la aviación.
Ocean Infinity se impuso sobre la oferta de la otra firma estadounidense que llegó a la última fase de licitación, SEA Sistemas Electrónicos Acuáticos, cuyo director ejecutivo, Hugo Marino, aseguró en abril que el submarino ARA San Juan era localizable en un periodo de 100 días.
Ambas compañías dispusieron un presupuesto más elevado que en el primer proceso de contratación, en el que se había adjudicado la búsqueda a una empresa española pero no salió adelante por haber sido objetado por varios familiares.
La empresa de Marino propuso una cuantía que ascendía a los 7 millones de dólares, mientras que Ocean Infinity estableció 7,5 millones, un pago que solo se realizará en caso de encontrar al submarino ARA San Juan.
Tras siete meses sin saber nada de sus seres queridos, a finales de junio un grupo de familiares y allegados de los submarinistas decidió acampar por tiempo indefinido en la Plaza de Mayo de Buenos Aires, frente a la sede del Gobierno, en reclamo de que se acelerase el trámite de la contratación.
El submarino se comunicó por última vez con tierra el 15 de noviembre de 2017, mientras volvía a su base de la ciudad bonaerense de Mar del Plata tras realizar una serie de operaciones del puerto austral de Ushuaia.
Fue así que se desplegó un intenso operativo de búsqueda, con ayuda de diversos países, a unos 400 kilómetros de la costa, zona en la que varias agencias internacionales registraron que había habido una explosión horas después de desaparecer el buque, cerca de donde se perdió su pista.
Sin embargo, nada se volvió a saber del submarino, y desde que se retiró el buque ruso "Yantar" a principios de abril, solo un navío argentino permaneció una temporada en la zona de búsqueda.