La casa está en orden...Por ahora el Tomba mantiene su fortaleza en el Malvinas Argentinas, y ahora tendrá la chance de ratificarla contra Tigre.
El equipo de Sebastián Méndez vive una situación que merece diván, porque es una versión como local y otra muy diferente fuera de nuestra provincia.
Es inexplicable cómo cambia su postura, teniendo en cuenta que en terreno ajeno ha perdido todos los encuentros y tiene el arco cerrado- no convirtió goles-, algo le produce un gran dolor de cabeza al Gallego.
En el Mundialista, el camino tombino se sostiene a paso firme, con cuatro triunfos y un empate. Sólo le pudo sacar unidades el elenco de Guillermo Barros Schelotto.
No hay dudas que el Bodeguero se siente muy cómodo ante su gente, porque aún sin mostrar un rendimiento de alto vuelo, saca un plus que le permite ganar los compromisos.
“No debería existir tanta diferencia en el funcionamiento, entre lo que hacemos de local y de visitante”, es una de las frases concurrentes del adiestrador.
Pero sí, hay una brecha muy grande y está claro que pasa en parte por el tema psicológico. Cada conquista sufrida en campo rival es un karma, y Godoy Cruz no encuentra la fórmula para reaccionar y dar vuelta los partidos.
Todo en el Tomba es de entrecasa. Se cocina en el propio hogar... Y en la mira está el “Matador”.