Durmió en una plaza para que su hijo pueda jugar en primera y afirmó más de una vez que "club que pisa Toto, club que sale campeón. Y esta no fue la excepción. Es Cristina, la mamá de Eduardo Salvio a quien se la conoce como "Tota" (también) quien fue parte de las emociones en la Bombonera. Con un pañuelo en la cabeza, tras ser operada de un cáncer hace un mes, no se quiso perder el festejo del campeón junto a su hijo.
Cristina contó que fue al médico buscando el permiso para ir a la Bombonera y después le dijo a la prensa que “estoy bien y ahora que pase lo que pase, ya lo vi campeón”.
En el medo de los festejos xeneize, uno de los momentos emotivos en la cancha de Boca fue justamente cuando el jugador dio cuenta de su madre avanzando de rodillas en el campo de juego mientras festejaban. Se acercó para darle un eterno abrazo tal como muestran las imágenes, la cual a muchos provocó el recuerdo de aquella mítica foto “abrazo del alma” de Ricardo Alfieri publicada en El Gráfico donde Fillol y Tarantini se abrazaron y un hincha sin brazos permaneció junto a ellos tras el histórico Argentina 3-Holanda 1 del Mundial 78.
La Tota Salvio, con su camiseta puesta, ya cumplió su sueño.