El sábado pasado Leonela Ayala (25) declaró ante el fiscal Gustavo Carracedo que ella no había asesinado a Sheila (10) y que no se encontraba en su casa (barrio Trujui, en la localidad bonaerense de San Miguel) en el momento del asesinato.
La mujer argumentó que -entre las 12 y las 18- se había ido con sus tres hijos mayores (NdR: la mujer dio a luz el sábado pasado) para almorzar con Martín, uno de sus hermanos.
Por tal razón declararán hoy testigos que habrían almorzado con Ayala el día en que desapareció Sheila.
Esa hipótesis deja a Fabián Esequiel González Rojas (24) como el principal autor del crimen.
"Si realizó un plan familiar, típico de domingo, como dijo, tiene que haber muchos testigos que la hayan visto y es razonable que se los cite a declarar a todos", confirmaron fuentes del caso.
Leonela Ayala está detenida y sus cuatro hijos, incluso el recién nacido,están bajo custodia judicial hasta que se resuelva la situación y se defina si pueden regresar con algún familiar.
Mientras, otra hermana del papá de Sheila, Juan Carlos Ayala, y de la imputada Leonela, apareció en escena y confió que llegó desde Entre Ríos para acompañar a su hermano en la búsqueda de su sobrina.
Según publicó Clarín, Andrea Celeste Ayala (34) declaró que vive en Entre Ríos desde hace 15 años, pero viajó a San Miguel para acompañar a su familia.
"Sheila y sus papás vivieron en Entre Ríos conmigo durante un tiempo, hace unos 4 años. Yo viajé para acompañar a mi hermano en la búsqueda. Lo único que quería era que la encontraran sana y salva".
Respecto de las acusaciones sobre su hermana Leonela, aclaró: "Cualquiera que haya sido responsable de esto, tiene que pagar. Si mi hermana sabía, estuvo, que ella y el marido se pudran en la cárcel".
"Si mi hermana la tiene que pagar, que la pague. Lo único que yo quiero es justicia y saber la verdad. Hacía cuánto tiempo mi sobrina estaba ahí, qué le hicieron y en qué momento. Eso es lo que quiero", sentenció la mujer.
Por su parte, González Rojas está detenido y se negó a declarar. Después del relato de su pareja quedó muy complicado. A él lo acusan de homicidio agravado por alevosía y por femicidio.
Por el momento, se esperan los resultados de hisopados que se realizarán en el cuerpo de Sheila para buscar rastros genéticos compatibles con un abuso.