A los 87 años, falleció ayer en una clínica de la ciudad alemana de Lübeck uno de los escritores iconográficos de la posguerra y también uno de los referentes políticos más polémicos de Alemania.
Por su trayectoria como escritor Grass fue galardonado con el Nobel de Literatura y el premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1999, cuarenta años después de la publicación de "El tambor de hojalata", quizá su novela más internacionalmente conocida.
Günter Grass nació en 1927 en Danzig (Gdansk), ciudad en donde creció y que, además, fue escenario de muchas de sus novelas.
Trabajó como picapedrero y estudió pintura y escultura en Düsseldorf y Berlín.
A los 17 años fue movilizado para la Segunda Guerra Mundial como auxiliar de aviación. Herido y hecho prisionero, fue liberado en 1946.
En la década de los 50 viajó por Italia, Francia y España, en los que inició su profesión de poeta. Su primer libro fue "Las ventajas de las gallinas de viento", publicado en 1956, año en el que el autor alemán fijó su residencia en París, donde escribió algunas obras de teatro y la novela por la que sería conocido en todo el mundo, la mencionada: "El tambor de hojalata", luego llevada al cine por el director Volker Schlöndorff en 1979.
En una línea que enlaza con la novela picaresca española, el protagonista de la obra, Oskar Matzerath, el niño que se niega a crecer como protesta contra las crueldades del pasado alemán, forma ya parte de la literatura universal.
De vuelta a Berlín en los 60, Günter Grass escribió otras dos novelas que forman, junto con "El tambor de hojalata", la denominada trilogía de Danzig: "El gato y el ratón" (1961) y "Años de perro" (1963).
En 1966 vio la luz su obra teatral más importante, "Los plebeyos ensayan la rebelión".
Políticamente muy activo, el autor alemán hizo en esos años campaña por el partido socialdemócrata y plasmó sus experiencias en "Diario de un caracol" (1972).
En los 70 viajó por Asia y América, se dedicó al grabado y la litografía, escribió numerosos ensayos y la novela "El rodaballo" (1977), que abarca miles de años y se desarrolla en nueve épocas, mezclando cuentos infantiles, mitología e historia.
En los 80, década en la que se centró en el dibujo, su principal obra literaria fue "La ratesa" (1986), una novela apocalíptica en la que las ratas heredan la Tierra. En 1986 se trasladó a la India, de donde regresó unos meses más tarde con muchas ideas, un cuaderno lleno de dibujos y un nuevo libro: "Sacar la lengua" (1988).
Aunque en 1992 publicó "Malos presagios" (una obra relativamente menor: una sencilla historia de amor), la gran novela de Günter Grass en los 90 fue, sin duda, "Es cuento largo" (1995), en la que abordó el difícil problema de la reunificación alemana. En ella estableció un paralelismo entre un personaje ficticio, Theo Wuttke, y el escritor decimonónico Theodor Fontane, autor de "Effi Briest".