La intención de ordenar los salarios dentro del Estado avanza en la Legislatura aunque con movimientos descoordinados y espasmódicos.
En medio de una agenda que pone en prioridad otros temas, como la pelea por la ley de reconducción presupuestaria, algunos legisladores ya van haciendo trámites previos y escribiendo borradores para comenzar a dar forma a una Ley de Sueldos. Por lo pronto, ya se han elevado pedidos de informes al Ejecutivo que esperan respuesta y servirán como el dato de base con el que se comience a elaborar la futura norma.
Otro de los avances que apunta en esta dirección es la creación de la comisión de reforma del Estado en el Senado, la cual está presidida por Gustavo Cairo y tiene como principal tema tratar el ordenamiento de los salarios.
La idea es que el gobernador, Francisco Pérez, sea quien más gane dentro del escalafón estatal. En este sentido señalan que “hay muchos más de 500 sueldos” por encima de lo que percibe el primer mandatario, a la vez que no se cumple la máxima que establece “igual remuneración por igual tarea”.
La discusión tiene su data, pero volvió a escena luego del último arreglo salarial con el sector de la Salud (todavía no ingresa a la Legislatura para tener ratificación), en donde se conoció que con el porcentaje sin topes otorgado, algunos profesionales tendrían incrementos de hasta 20 mil pesos.
“La jefa de farmacia del Hospital Central está ganando 82 mil pesos mensuales”, ejemplificó Cairo y dijo que se quedó “corto” con su pedido de informe para saber cuáles son los 500 sueldos más altos: “Me parece que son mil”.
A este pedido de informe elevado al Ejecutivo (con copia al Ministerio de Salud) se suma otro similar llevado a la Suprema Corte para que informen cuánto ganan los jueces.
“Lo más serio es que nosotros trabajemos el anteproyecto con esa información en mano, una vez que la resolución ingrese a la Legislatura”, señaló el diputado peronista Jorge Tanús, impulsor de una ley de orden público a partir del último aumento a la Salud. “Ésa fue la razón política”, justificó. Con los tiempos por delante, el legislador calculó que la norma podría tomar forma recién después del receso de invierno.
Pero en el mientras tanto la idea circula en los pasillos y prende en distintos legisladores que aún no se animan a decir si se trabajará de lleno en una comisión bicameral o si se presentará en proyectos separados. “Tenemos un borrador que hemos hablado con los otros bloques”, dice Tanús al respecto e involucra a algunos diputados radicales, entre los que están Martín Kerchner y Néstor Majul.
“Hay momentos políticos en los que hay mayor apoyo a esta iniciativa, pero es imprescindible lograr una ley general como parte de una política de Estado”, suma el senador radical Sergio Moralejo su iniciativa. El legislador habló de las dificultades de una “pirámide salarial anarquizada”.
En este sentido, hay en total cinco regímenes estatales: la administración central, los organismos descentralizados, los municipales, las empresas estatales y los sueldos de los cargos políticos. Estos últimos son los únicos que están atados a un porcentaje de lo que gana el Gobernador.
“Los municipios son los que están más retraídos en sus salarios. A su vez, entre las distintas dependencias se dan desigualdades en los mismos cargos”, agregó Tanús como uno de los temas a sortear y ejemplificó: “Un administrativo del Instituto Provincial de la Vivienda gana más que uno que trabaja dentro de un municipio la misma cantidad de tiempo”.
La propuesta que de a poco levanta vuelo también anticipa una discusión que se vendrá de seguir en marcha la ley de orden público: los haberes de los jueces, actualmente atados a la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Ante esto, aclaran: “No se tiene que hablar de números sino de establecer una convergencia a mediano plazo entre las pirámides”, aclaró Moralejo.
