Sin dudas, las elecciones presidenciales 2015 estuvieron marcadas por la semifinal del Mundial de Rugby que jugaron Los Pumas. Es que en la gran mayoría de las escuelas mendocinas fue muy notoria la ausencia de gente entre las 13 y las 15.
De hecho, a nivel general, casi no hubo espera salvo algunas mínimas que se generaron antes de esa hora. Con esta particularidad, más algunas denuncias por falta de boletas y una amenaza de bomba en un colegio, se desarrolló la jornada electoral de ayer en nuestra provincia donde votó aproximadamente 85% del padrón.
“Ha estado todo muy tranquilo, la gente llegaba y se iba”, relató Ornella, a quien le tocó ser presidente de mesa en la escuela Normal Tomás Godoy Cruz de Capital. “Eso sí, antes del partido vino todo el mundo y después se calmó un montón”, resaltó la joven.
Desde el colegio Guillermo Rawson de Godoy Cruz, también notaron esta tendencia. “Fueron viniendo en grupitos, pero durante el partido no vino casi nadie así que pudimos almorzar tranquilos”, contó Emilia Sáenz, titular de una de las mesas. Lo que sí comentó la chica fue que varias personas se quejaron de la falta de boletas. “Tuvimos que entrar y responder varias veces, nos llamó bastante la atención”, remarcó.
Para Elizabeth Reche, delegada de la Secretaría electoral en la escuela Mariano Necochea de Las Heras, la gente se concentró antes y después de la semifinal que jugaban Los Pumas. “Hubo una brecha muy notoria entre las 13 y las 15, pero vino bien para que los chicos descansaran un poco”, expuso la encargada.
Previendo este panorama, Oscar López decidió sufragar justamente en ese horario. “Mis hijos fueron un poco más temprano y me contaron que había bastante gente adelante y como a mí no me gusta el rugby decidí esperar a que empezara para movilizarme hasta la escuela”, señaló el hombre que votó en la escuela Bartolomé Mitre de Capital.
Ana María Catalioto también se encontró con un ambiente muy tranquilo cuando concurrió a las urnas en el Colegio Español de Guaymallén alrededor de las 14. “Voté recién y muy rápido. Vinimos después de comer porque a la mañana estuvimos organizando la casa”, narró la mujer que llegó junto con su marido. “La última vez estuve como una hora y cuarto parada en la fila, pero ahora todo fue muy ágil”, destacó.
Falta boletas
Un reclamo que se escuchó en varios establecimientos educativos fue la falta de boletas del Frente Renovador que deberían haber llegado temprano con las urnas y el resto de las papeletas de los otros partidos. “Tuvimos un inconveniente porque los presidentes de mesa se dieron cuenta que en las bolsas de las urnas no venían las boletas del partido de Massa”, comentó Carina Cocucci, delegada electoral del Colegio Español de Guaymallén. Para solucionarlo recurrieron a las boletas de contingencia que guardan los delegados de todos los partidos.
"También notamos roturas y robos de boletas en varias mesas, pero eso fue rápidamente acomodado", aseguró la mujer.
En el colegio Mariano Necochea se repitió la situación y si bien la falta se comunicó temprano, desde el partido recién trajeron las boletas pasadas las 15. "Nos avisaron temprano desde acá, demoramos un poco pero ahora ya los solucionamos", informó Germán Medina, fiscal general del Frente Renovador. "Nos ha pasado en varias escuelas y no sabemos por qué", se quejó.
En declaraciones radiales, el juez Federal con competencia electoral en Mendoza, Walter Bento, explicó que desde ese partido no les llevaron la cantidad suficiente de boletas como para que alcanzaran para todas las mesas por los que inevitablemente faltaron en algunas. Según manifestó, desde el Frente afirmaron que los fiscales de cada partido se encargarían de distribuir las boletas en los establecimientos educativos.
Amenaza y detención
Como ha ocurrido hace pocos días en universidades y hasta en Casa de Gobierno, ayer se repitió un llamado anónimo de amenaza de bomba en una de las escuelas donde se votó.
Se trató de la escuela Petrona Guiñazú de Burgoa, de Godoy Cruz que fue evacuada al mediodía en medio de los comicios. Pasado un tiempo la Policía, que dio aviso a la brigada de explosivos, constató que la amenaza era falsa y reanudó la votación. Igualmente, para dejar tranquilos a los presentes, soldados del Ejército reforzaron la seguridad del establecimiento.
Entre tanto, en la escuela Dr. Julio Mayorga -donde votaba el gobernador Francisco Pérez- quedó detenido un hombre que fue a votar y tenía pedido de captura.