La prohibición de venta de espumantes en boliches y pubs de San Rafael sigue dando que hablar. La determinación tomada por el juez de Faltas, Oscar De Diego, fue duramente criticada por diferentes entidades vitivinícolas de la provincia, quienes acusaron a la resolución como “injusta” contra la industria y prometieron dar pelea para que la situación se revierta.
La voz de alarma ya se había encendido la semana pasada, luego de que se ordenara el secuestro de botellas de espumantes en diversos locales bailables de San Rafael. De Diego, juez de Faltas de ese departamento, fundamentó su decisión en el texto de la ordenanza municipal 11.024, sancionada en noviembre de 2012. La misma prohíbe las promociones que fomenten el consumo de alcohol y especifica que, en caso de detectarse envases de 750 cc de espumantes o frizzantes, y de 970 cc de cerveza en bares y pubs, deben ser quitados de circulación (aunque sí se permiten envases de 187 y 375 cc).
El objetivo real de De Diego, no es perjudicar a la industria vitivinícola sino combatir el alcoholismo en la juventud y reducir el número de accidentes fatales a la salida de los boliches. Sin embargo, para los actores de la vitivinicultura, el juez sanrafaelino no ha tomado el camino correcto y la determinación "perjudica al negocio del vino sin aportar soluciones reales al problema del alcoholismo".
La voz del vino
Enojo, indignación y desacuerdo. Así puede definirse la reacción de los actores vitivinícolas ante la intervención de Oscar De Diego. Sergio Villanueva, gerente de la Unión Vitivinícola Argentina (UVA), definió la medida como “demagógica y simplista”. Además, opinó que no ataca al fondo del problema.
"Se está discriminando a la industria vitivinícola cuando son otras las bebidas que proponen en sus campañas publicitarias el consumo en fiestas y el descontrol", comentó el experto.
“Con esto no quiero decir que se deban prohibir otras bebidas, sino que la solución está en otra parte. Hay que trabajar en la contención social y en los trastornos culturales que fomentan el exceso”, opinó Villanueva.
Javier Palau, titular del Centro de Viñateros y Bodegueros del Este, se mostró preocupado por la desigualdad de criterios. “Es preocupante que se ataque sólo a los espumantes, cuando los excesos se producen con otras bebidas de mayor graduación alcohólica. No estoy de acuerdo con la prohibición pero, en caso de existir, debería ser igual para todas las industrias”, protestó.
Analizando la decisión del juez sanrafaelino, Palau consideró la posibilidad de que las bodegas inviertan en líneas de fraccionamiento que les permitan embotellar en los tamaños permitidos, pero aseguró que el cambio de envase no aportaría ninguna solución al problema del alcoholismo.
Juan Carlos Pina, gerente de Bodegas de Argentina, también se opuso a la medida y coincidió en que la solución al problema no está en las restricciones sino en la educación y los controles.
Por lo pronto la prohibición continúa vigente y no aparecen soluciones. Desde las diferentes entidades vitivinícolas mostraron preocupación por el futuro que el conflicto pueda tener en San Rafael y temen que medidas similares se extiendan al resto de la provincia.
Sergio Villanueva, de la UVA, aseguró que la industria en su conjunto estudiará la situación desde el punto de vista técnico y jurídico. Además recordó el peso que tiene la declaración del vino como “Bebida Nacional” y pidió al Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) que lidere y guíe la resolución del conflicto.
Tomando esa postura, Guillermo García, presidente del INV, envió una carta a la intendencia de San Rafael pidiendo que se revise la interpretación del juez sobre la resolución 11.024. “Desde el Instituto estamos en desacuerdo con la tolerancia cero y defenderemos a la industria”, indicó.
El INV sancionó a 84 firmas en el sur provincial
En lo que va del año, el Instituto Nacional de Vitivinicultura ya aplicó 84 sanciones a establecimientos vitivinícolas de San Rafael y General Alvear por incumplimientos de la Ley de Vinos.
La cifra es alarmante teniendo en cuenta que entre ambos departamentos sólo hay 84 establecimientos elaborando vinos durante esta temporada (60 pertenecen a San Rafael y 24 de Alvear). Sin embargo, esto no significa que sean 84 las bodegas infractoras, ya que una sola empresa puede haber cometido más de una falta.
Desde el INV aclararon que la mayor cantidad de incumplimientos tiene que ver con faltas en la reglamentación de trazabilidad. “En general se trata de errores chicos que implican multas menores. No es un dato preocupante”, observaron.
