Un reciente informe de la división vinos del Banco Supervielle, indica que desde hace unos cinco años comenzó una caída tanto del mercado doméstico como de la exportación y en 2016 el volumen total volvió a situarse por debajo de 140 millones de cajas.
La disminución de más de 13 millones de cajas entre 2012 y 2016 fue la principal causa de acumulación de stocks que vivió la industria previo a la mala cosecha de 2016.
“El mercado nacional viene declinando en las últimas tres décadas y con variaciones esporádicas parece encontrarse relativamente amesetado desde 2008, siendo sus variaciones de volumen muy dependientes de lo que sucede en la base de la pirámide de precios, especialmente en los envíos de vino en tetrabrik. A su vez el mercado externo viene mostrando declinaciones en volumen tanto en el mercado de vinos fraccionados como en los envíos a granel. Este año, en total, la cifra ha tocado el valor mínimo de la década”, señala el reporte.
El análisis del Supervielle indica que la caída ha sido más pronunciada, particularmente en los precios. “El promedio del mercado doméstico ha declinado desde 2011 un 16% pasando desde 232 a 194 pesos la caja promedio. A su vez el mercado externo ha tenido fuertes oscilaciones que tienen relación con las variaciones del mercado de vino a granel.
En resumen, el sector vitivinícola alcanza en 2016 una cotización promedio de casi 236 pesos por caja de 12 botellas mientras que su máximo valor de la década ocurrió en 2010 con 284 pesos. Es decir una caída del 17 por ciento en moneda constante", sostiene.
Agrega: “Cuando en un mercado se observan caídas en precios y en volúmenes de venta se puede inferir que la causa más importante proviene de una caída de la demanda y como se señalaba con anterioridad, esto fue consecuencia de la inflación sobre el salario en el mercado doméstico y el tipo de cambio en la exportación”.
Para el banco, una combinación de menor volumen y menores precios ubicó la facturación total de la industria en un cifra similar a la del año 2006 y un 18% por debajo del máximo histórico alcanzado en 2011.
Así, la industria acumula 5 años de caídas consecutivas en sus ventas, lo cual ha tenido efectos nocivos en varios frentes.