La definición del presupuesto provincial para el año próximo todavía está en veremos, sujeta a la incertidumbre que reina en el país de cara a las elecciones presidenciales, en las que el resultado de las PASO y las encuestas marcan una fuerte probabilidad de que haya un cambio de presidente y proyecto político.
Si bien en Mendoza el futuro ya fue resuelto con el triunfo del actual oficialismo el domingo, la pauta de gastos prevista para 2020 está sujeta a lo que finalmente se apruebe en la Nación. Y si bien el gobierno de Mauricio Macri ya elevó el proyecto de Presupuesto Nacional al Congreso, la situación política hace dilatar el tratamiento ya que se acordó su debate para después de las elecciones del 27 de octubre.
Como es de preverse, si Alberto Fernández es electo querrá delinear la pauta de gastos para lo que sería su primer año de gestión. Y algo de eso ocurre en Mendoza, con diferencias sustanciales ya que Rodolfo Suárez es la continuidad del proyecto de Alfredo Cornejo.
De hecho, el propio Suárez ha dicho en declaraciones periodísticas que sus equipos técnicos ya están trabajando con los equipos de Cornejo en varios temas. "Sin dudas tenemos muchos proyectos. El más importante es el presupuesto, en el que estamos trabajando con los equipos de Alfredo", expresó en Radio Mitre el miércoles.
Incluso, desde el Ejecutivo provincial reconocieron a Los Andes que serán los técnicos del equipo de Suárez (liderados por Enrique Vaquié y Alejandro Gallego) “quienes van a tener la decisión final”. Sin embargo, no está definido si será Cornejo o el futuro gobernador el que eleve el proyecto a la Legislatura. “Si llega a haber balotaje se podría dilatar aún más”, confió una fuente.
Si bien está estipulado que la ley de leyes debe presentarse antes del 30 de setiembre, es inusual que se cumpla este plazo, sobre todo en años de cambio de gobierno.
Hasta ahora no hay novedades respecto a la fecha en la que el Ejecutivo elevará las previsiones a la Casa de las Leyes, ni siquiera los proyectos de Avalúo e Impositiva, que anteceden al tratamiento de Presupuesto. Tampoco está definido si se hará con la actual composición legislativa o esperarán al recambio, que se concretará el 27 de noviembre y que le dará a Suárez una mayoría aún más holgada que la que tuvo Cornejo.
"Es un año atípico", destacaron desde la Legislatura y repitieron la justificación: la incertidumbre nacional.
Proceso electoral
En medio de este escenario, la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública publicó un informe en el que analiza el proyecto nacional de Presupuesto 2020. "Se discutirá en medio del proceso electoral donde se elegirá al Titular del Poder Ejecutivo Nacional, los gobernadores de las provincias de Buenos Aires, Catamarca y La Rioja, los intendentes de numerosos municipios, como así también diputados y senadores nacionales y provinciales. Este escenario se dará en un contexto complejo en términos macroeconómicos, políticos e institucionales, y plantea desafíos en el proceso de elaboración y aprobación del presupuesto", sostiene el documento.
Además, asegura que "la volatilidad económica observada desde abril de 2018 se acrecentó luego de las elecciones PASO. Las principales variables macroeconómicas experimentaron bruscos cambios nominales, que impactarán en el cierre del ejercicio 2019, al tiempo que generan incertidumbre sobre el escenario macroeconómico del año próximo. Esta situación derivó en la implementación de una serie de medidas por parte del Ministerio de Hacienda y el Banco Central de la República Argentina (BCRA) con el objetivo de promover la estabilidad macroeconómica durante el proceso electoral".
"El conjunto de definiciones plasmadas en este presupuesto estarán sujetas al resultado de las elecciones a realizarse en octubre del presente año. En caso de que se produzca un cambio de gestión, seguramente se trazarán nuevos lineamientos de política económica -admite el informe-. Además, la presentación del presente presupuesto en medio del proceso electoral puede tener consecuencias en términos de proyecciones macroeconómicas y fiscales. En ese sentido, sería recomendable avanzar a futuro en la generación de mecanismos institucionales que permitan realizar las modificaciones presupuestarias que surgen de los cambios de gestión en el Poder Ejecutivo", considera ASAP.