Esta tarde uno voraz incendio provocó importantes daños en la Catedral de Notre Dame, uno de los edificios más emblemáticos de la historia de Francia. Aunque lo daños materiales hasta el momento son incalculables, sin duda los daños históricos serán irreparables.
Dedicada a la Virgen María, Notre Dame es uno de los templos góticas más antiguas del mundo. Está ubicada en el centro de París es uno de los paseos casi obligados para los turistas de todo el mundo.
El imponente edificio de dos torres fue construido entre 1163 y 1245 en la Isla de la ciudad y su nombre significa Nuestra Señora.
Durante sus ocho siglos de historia, ha sido reformado en varias ocasiones, siendo la más importante la de mediados del siglo XIX.
Desde sus torres se puede observar vistas fantásticas e incluso visitar el campanario en el que vivió el mítico Jorobado de Notre Dame y ver de cerca las múltiples gárgolas.
Durante sus distintas reformas se sustituyeron los arbotantes, se insertó el rosetón Sur, se reformaron las capillas y se añadieron estatuas.
En su cripta, ubicada en el subsuelo de la plaza que lleva el mismo nombre, contiene las ruinas descubiertas durante las excavaciones de 1965.
Además, ha sido testigo de acontecimientos históricos tales como la coronación de Napoleón Bonaparte, la beatificación de Juana de Arco y la coronación de Enrique VI de Inglaterra.
La catedral de Notre Dame, con alrededor de 13 millones de visitantes al año, es el monumento histórico más frecuentado de Europa.