El abogado Manuel Romero Victorica, quien representa la querella de las hijas del fallecido fiscal Alberto Nisman, calificó hoy de "pueril" la versión sobre la entrega del arma que dio el técnico informático Diego Lagomarsino, de quien el fiscal Eduardo Taiano pidió la indagatoria como supuesto partícipe primario del presunto crimen del entonces titular de la UFI-AMIA.
"Su relato fue pueril. Nadie le creyó que el fiscal Nisman la había pedido un arma para cuidar a sus hijas, que estaban del otro lado del océano Atlántico, al cuidado de su madre, que es una jueza federal", resaltó Romero Victorica en declaraciones a radio Mitre.
"Al fiscal Nisman le pegaron un tiro en la cabeza", subrayó el abogado, quien insistió con que "se quiso encubrir ese homicidio".
"Se nos quiso hacer creer a los argentinos que se trataba de un suicidio. Se plantó un arma y se nos hizo creer que se había suicidado porque su denuncia era un mamarracho, y resultó ser que de mamarracho nada tenía, porque la Cámara de Casación Penal dijo que era coherente, verosímil y plausible", aseveró.
Hoy, el fiscal Taiano pidió al juez federal Julián Ercolini, a cargo de la investigación de la muerte de Nisman, que cite a declaración indagatoria a Lagomarsino como presunto partícipe primario del hecho.
En su pedido, Taiano dio por probado que Nisman fue asesinado con el arma que le entregó Lagomarsino, con lo que dio por válida la pericia de Gendarmería Nacional que dictaminó en ese sentido.
Romero Victorica recordó que las querellas pidieron que la causa se recaratule como "homicidio agravado", ya que actualmente tiene la carátula de "muerte dudosa".
"Se ha reconfirmado (con la pericia de Gendarmería, que concluyó que a Nisman lo mataron) que el arma que se secuestró en Le Parc, al dispararse, deja tres sustancias: plomo, bario y antimonio. En las manos de Nisman esas tres sustancias no estaban. Esto está desde el primer día", reprochó el letrado.