Agosto lleva casi dos semanas, el mismo tiempo desde que Ecogas suspendió la emisión de facturas para sus clientes en la provincia de Mendoza.
Aunque la distribuidora del servicio de gas natural en Mendoza no especifica los motivos, la decisión remite a una resolución del Enargas que varias prestadoras regionales del servicio en el país interpretan como “libertad de acción” sobre qué, cómo y cuándo facturar los consumos.
Sin dar certezas ni precisiones, desde la matriz de Distribuidora de Gas Cuyana dijeron a Los Andes desconocer hasta cuándo seguirá frenada la emisión de boletas. Una decisión que alcanza a sus más de 500 mil cuentas en la región, una mayoría de ellos (más del 80%) mendocinas.
La respuesta fue ambigua. “No lo sabemos. Hasta que recibamos instrucciones oficiales”, fue la declaración desde el seno de Ecogas en Córdoba.
Si bien no se especificó si hubo una “instrucción oficial” que haya habilitado a la distribuidora a adoptar esa medida, todo hace pensar que Cuyana, al igual que otros tantos concesionarios de distintas provincias, pusieron punto muerto a la espera que la confusa situación judicial con respecto al tarifazo sea resuelto en la Corte Suprema de Justicia.
Cabe recordar que, desde fines de mayo y hasta setiembre, por resolución de la jueza federal mendocina Olga Arrabal, Ecogas debía facturar un tope del 80% de aumento. En el medio, se sucedieron noticias acerca de amparos en busca de dar marcha atrás y medidas del Ministerio de Energía, como la de fijar un techo del 400%.
El cuadro de situación se complicó luego del dictamen de la Cámara Federal de La Plata, que en julio admitió un amparo colectivo para retrotraer las tarifas a marzo. El fallo fue recurrido con un recurso extraordinario interpuesto por el Gobierno nacional, lo que llevó la causa al máximo tribunal.
Versión libre
Al respecto, una resolución del Enargas de fines de julio da algunas señales que pueden ayudar a entender los porqué de los últimos cambios en cuanto a la facturación.
Aunque no es del todo explícita, la nota 6820 de 2016, que lleva la firma del titular del ente regulador del gas a nivel nacional, David Tezanos, da algunas pistas. Se basa en la vigencia de las resoluciones que van desde la I/3725 a la 3733 (del 31 de marzo último), y la 3737 (del 8 de abril) en el marco de la causa judicial.
Dichas resoluciones son las que sucesivamente significaron ajustes a los cuadros vigentes. En particular, la 3730 estipula las condiciones para Distribuidora de Gas Cuyana: entre otros aspectos, la aplicación de nuevos cuadros a partir del 1 de abril, la obligatoriedad del cobro mensual (dos pagos equivalentes al 50% hasta completar el monto bimestral del consumo) y de aplicar un plan de inversiones de $ 116.700.000.
De carácter similar, la 3729 se refiere a su “prima hermana”, Distribuidora de Gas del Centro, a la que le impone el compromiso de invertir $ 148.600.000.
“Las resoluciones no han sido declaradas nulas en dichas actuaciones, pero en la medida que las mismas reconocen como antecedente esas decisiones ministeriales, no es factible su aplicación hasta tanto se resuelva sobre la concesión o denegación del recurso extraordinario federal interpuesto por el Estado nacional”, señala, entre otras consideraciones la nota 6820 de 2016 de Enargas.
Lo dicho: sin ser demasiado clara, desde el Enargas, con anuencia de las distribuidoras, admiten que deja abierta la puerta a una libre interpretación de los prestadores.
“De ello se desprenden tres escenarios posibles: facturar sin el tope del 80%, facturar los viejos cuadros tarifarios y no facturar”, describen desde el ente.
Esperar y reclamar
Del lado de los usuarios, la novedad ya generó malestar y desconcierto. Como el que experimenta Juan, que vive en Godoy Cruz y cuenta que al menos desde julio la falta de información sobre lo que tiene lo tiene preocupado.
“La factura anterior ya no la recibí, a pesar de que la empresa tenía que re facturar. Ahora me entero que tampoco la nueva, porque Ecogas dejó de facturar. No sé que hacer, porque encima si aparezco como moroso corro el riesgo de que me corten el servicio”, relata.
Para José Luis Ramón, apoderado legal de la asociación Protectora, “esta es una picardía de la empresa, que pone en jaque a la gente. Los usuarios no saben y están asustados”.
Respecto a lo que debería haber pasado con las facturas y lo que vendrá, según Ramón “lo serio es que hubieran sido emitidas sin el aumento, hasta que el asunto se resuelva en la Corte. Ahora, vamos a esperar el fallo”.
En un intento de poner paños fríos entre los ánimos cada vez más caldeados, desde la oficina local del Enargas recomiendan reclamar llegado el caso.
“Los usuarios deben reclamar su factura, una vez cumplida la fecha de vencimiento indicado en la anterior. Por otra parte, más allá de lo que pasa, si no se registra un pago técnicamente la mora empieza a correr”, explicó Gustavo Paigos, de la gerencia de atención a los usuarios en Mendoza.
Mientras tanto, en la delegación local del ente sigue el desfile de mendocinos con muchas dudas acerca de qué hacer con las boletas anteriores.