Tener un perro mestizo es, sin lugar a dudas, aprender a ver a una vida más allá de lo superficial. Ellos indiscutiblemente son únicos, irrepetibles, llenos de amor y compañía incondicional para brindar.
SON ESPECIALES
Un perro mestizo llegará a tu vida cuando menos lo esperes, sin valor económico alguno, sin que tengas que ir a buscarlo a pets shop, simplemente será él quien te conquiste y te robe el corazón.
Ese perro que está en un albergue, en un hogar de paso o en un refugio, espera con muchas ansias el ser amado, es por ello, que su capacidad de afecto y cariño es enorme, son extremadamente agradecidos con el regalo más pequeño que les puedas ofrecer, con sólo tener una mantita en dónde echarse y pasar la noche, son los perros más felices del mundo. Tratarán de complacer a esa nueva familia que les dio una oportunidad de vida de la mejor manera.
Y no dejamos atrás su inteligencia, su capacidad de entendimiento es increíble.
SON LONGEVOS
Como ellos son únicos, no son de raza pura, no sufren degeneraciones por consanguinidad, como pasa en algunas razas puras, como por ejemplo los dálmatas y su afección de sordera. Los hermosos perros mestizos tienen una admirable resistencia física natural, gracias a sus mezclas. Todo lo anterior los hace mucho más resistentes a las enfermedades y gozan de una gran longevidad.
SON PURO AMOR
No somos nadie para vernos con el derecho de señalar o rechazar una vida por no ser de “raza”. Recordemos que los seres humanos no somos de pura raza, venimos de la mezcla de muchas.
SON AGUERRIDOS
Los perros mestizos son la mejor raza, por la sencilla razón de que ha sido la naturaleza quien ha determinado sus condiciones. A diferencia de las razas de criaderos, los perros mestizos tienen una carga genética de selección natural que los hace, biológicamente, más adaptados y adaptables al medio en general.
Debido a esta condición deben considerarse verdaderos supervivientes, pues tanto ellos como sus ancestros, seguramente han tenido que pasar varias pruebas que han puesto en peligro su vida. Al ser muchas veces desechados por no tener una raza pura, han tenido que pelear contra condiciones adversas y seguramente, contra otros animales por el alimento o por territorio, lo que los hace grandes elegidos de la selección natural.
Existen en Mendoza refugios y veterinarias donde podés conseguir una mascota. Incluso en alguno de estos lugares están desparasitados y esterilizados. Sean perros o gatos, lo importante es querer compartir los beneficios mutuos que brinda el amor.