La Eurocopa con más equipos de la historia no tiene un claro favorito pero todas las miradas apuntan a los clásicos. Cuando ruede la pelota en París y Francia y Rumania se jueguen los primeros puntos, 24 selecciones divididas en seis grupos de cuatro buscarán llegar a la gran final parisina del próximo 10 de julio.
El torneo parece uno de los más abiertos de las últimas décadas pero se puede destacar a cinco equipos, con el respeto debido al último campeón europeo y al último campeón mundial.
España ganó las dos últimas Eurocopas -2008 y 2012-, pero se estrelló en el Mundial de Brasil de 2014. Una eventual tercera consagración consecutiva la convertiría en la reina del fútbol europeo, pero el equipo del DT Vicente Del Bosque cambió, y la renovación debe todavía demostrar el nivel de la anterior. Aunque conserva piezas claves como Iniesta, Ramos, Piqué, Busquets, Silva o Fábregas, los nuevos -Koke, Thiago, Nolito, Morata, Aduriz- no han probado ser sustitutos del nivel de Xavi, Xavi Alonso, Villa o Torres.
Alemania, campeón del Mundo hace dos años, será otro de los favoritos. Conserva la base de Brasil con algunas novedades interesantes pero en los últimos amistosos dio señales contradictorias -entre ellas una estrepitosa caída por 1-3 contra Eslovaquia- y tiene dudas en la defensa.
Francia entra como favorita por ser anfitriona y por jugadores como Griezman, Martial o Pogba. Pero los de Deschamps perdieron a sus dos defensores centrales titulares por lesión y la baja del delantero Benzema deja el gol en los botines de un errático Giroud.
Inglaterra parece tener el mejor equipo de los últimos años, absolutamente renovado, plagado de jóvenes y con la sensación del fútbol europeo de esta temporada: el punta Jamie Vardy, quien en pocos años pasó del fútbol amateur y las cervezas con los amigos tras el turno en la fábrica a convertirse en el máximo goleador de la Premier League en el sorprendente campeón Leicester.
Italia, siempre peligrosa y con un equipo basado en la estructura de la Juventus, tiene claro a lo que juega pero le faltan nombres que destaquen y ya no tendrá la batuta del mago Andrea Pirlo para darle orden y continuidad al juego.
Los italianos se estrenarán contra una Bélgica que, con Hazard y De Bruyne al mando, quiere creerse que ya puede competir por el título después de su buen papel en Brasil. Unos pasos por detrás aparece el Portugal de Cristiano Ronaldo -un equipo apenas renovado en más de una década- y la Croacia de Modric y Rakitic -buen toque y debilidad defensiva-.
La ampliación de 16 a 24 equipos hace que entren en el torneo selecciones como Islandia, Albania y Rumania -dos bestias presionando y jugando al contraataque. También aparece por primera vez Gales, catapultada por las carreras y los misiles de Gareth Bale. Polonia y Suecia rendirán más o menos según lo que hagan sus estrellas Lewandowski e Ibrahimovic. Austria, Eslovaquia, Suiza, Turquía, Rusia, Ucrania o Hungría intentarán hacer un papel digno.
Didier Deschamps: "Desde hace dos años nos preparamos"
“Independientemente del partido, está el contexto del encuentro inaugural y todo lo que eso representa. Pero no hay que hacer de ello una montaña (...) Nos preparamos desde hace dos años y hay que comenzar la competición con ganas, determinación y generosidad”, declaró el técnico local. “Cuanto menos influencia tenga en los jugadores el entorno, mejor será”, añadió en conferencia de prensa.
Para los jugadores, “lo fundamental es no focalizarse demasiado pronto y tener confianza”. “Hay que tener ese temor, el nudo en el estómago, apretar los dientes, pero tenemos que ir sin calcular, sin presión, sin debilidad. El antes no nos debe condicionar nuestro estado de ánimo al pisar el césped”.
¿Serán sorpresa?
Más allá de los nombres consagrados, en esta Eurocopa apunta una nueva generación de futbolistas europeos. Destacan los franceses Kingsley Coman (20 años) y Anthony Martial (20), los rumanos Nicolae Stanciu (23) y Florin Andone (23), el suizo Nico Elvedi (19), los ingleses Dele Alli (20), Eric Dier (22), Harry Kane (22) y Marcus Rashford (18), el ruso Alexander Golovin (20), el eslovaco Ondrej Duda (21), los alemanes Jonathan Tah (20), Joshua Kimmich (21), Emre Can (22), Julian Draxler (22), Julian Weigl (20) y sobre todo Leroy Sané (20), un extremo al que Alemania cuida como una joya. También merecen atención el polaco Bartosz Kapustka (19), el ucraniano Viktor Kovalenko (20), el español Héctor Bellerín (21), el turco Ozan Tufan (21), los belgas Jason Denayer (20) y Yannick Carrasco (22), el sueco Victor Lindelöf (21), el portugués Renato Sanches (18) y el húngaro Ádám Nagy (20).
